tag:blogger.com,1999:blog-28901326434225749272024-02-06T18:18:01.472-08:00Meditación con Tara BrachTara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.comBlogger21125tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-57988363632280236202014-05-15T12:28:00.001-07:002014-05-15T12:28:57.042-07:00Orando con Presencia Parte I<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjP3uz_WrGB7UBYQoSC9keGT4OXOkNjmX-hVd95j9b2OWDfUbj1R7OaJ5zqn7kwA5to6gonHn2dTQMNQITArHdX5T7HqRceKeXtm16U_DIwGphyphenhyphenq260fsNb1QXbKxvnnQh6jmk7P9Sqg-f5/s1600/almost_may-300x225+(1).jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjP3uz_WrGB7UBYQoSC9keGT4OXOkNjmX-hVd95j9b2OWDfUbj1R7OaJ5zqn7kwA5to6gonHn2dTQMNQITArHdX5T7HqRceKeXtm16U_DIwGphyphenhyphenq260fsNb1QXbKxvnnQh6jmk7P9Sqg-f5/s1600/almost_may-300x225+(1).jpg" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Foto cortesía de Paul Bica</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">En
momentos de desesperación, no importa lo que creamos, todos pedimos ayuda a
alguien o algo en forma de oración. Quizás lo hacemos buscando alivio de una
migraña, para ser elegidos en una posición laboral, o quizás rezamos para
encontrar la sabiduría necesaria para guiar a nuestro hijo en tiempos
difíciles.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Tal vez solamente
susurramos, “por favor, por favor,” y sentimos que le estamos pidiendo<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ayuda al “universo.” Cuando nos sentimos
desconectados y tenemos miedo, anhelamos el confort y la paz que viene de saber
que pertenecemos a algo más grande y más poderoso.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Sin embargo, ¿exactamente a quién le estamos orando? <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Yo crecí en la <span style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">Iglesia Unitaria</span>, y recuerdo
como solíamos hacer chistes y nos preguntábamos a quién teníamos que dirigir
nuestras oraciones, quizás “A quien corresponda.” Los que seguimos el camino del
Buda tal vez deberíamos hacernos<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>la misma pregunta. Aquellos que estudian el Budismo por lo general
relacionan la acción de orar con los cristianos y otras religiones cuyo centro
es Dios.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Implorar a alguien o algo
más grande que nuestro pequeño y temeroso ser parece reforzar la noción de un
ser separado y que desea pedir. Sin embargo, mientras que la oración sugiere un
dualismo entre el yo y otro. En mi experiencia, el hecho de habitar plenamente
nuestro deseo, nos puede llevar a una tierna y piadosa<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>presencia, que resulta ser nuestra
propia naturaleza iluminada.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Hace unos años yo
tuve una decepción amorosa. Me había enamorado de un hombre que vivía a 2000
millas de distancia, al otro lado del país. A raíz de las diferencias que
existían con respecto al tipo de familia que queríamos tener y donde queríamos
vivir, decidimos terminar la relación. La pérdida fue devastadora. Por varias semanas
yo vivía obsesionada con él; lloraba y sentía una tremenda pena. Dejé de
escuchar la radio porque las canciones de rock me llevaban a las lágrimas.
Evitaba las películas románticas. Casi ni hablaba con mis amigos sobre él
porque con el solo hecho de decir su nombre en voz alta, la herida volvía a
abrirse.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";">Acepté el proceso
de duelo el primer mes </span>pero, a medida que pasaba el tiempo, me comencé a sentir avergonzada de
tener un sentimiento de desolación tan grande y dominante. Además, sentía que había
algo malo en sentirme tan destruida. El seguía con su vida, salía con otras
mujeres. ¿Por qué yo no podía hacer lo mismo? Intenté
despertarme de las historias que yo había creado. Traté conscientemente
de dejar que el dolor pasara, pero yo permanecía prisionera de sentimientos de anhelo
y pérdida. Me sentía más insoportablemente sola de lo que nunca me había
sentido.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">En el cuarto donde
yo practico meditación, tengo una pintura de un pergamino tibetano (llamado
thanka) de la bodhisattva de compasión. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Conocida como Tara en el Tíbet y Kwan Yin en China, ella es
la encarnación de la curación y la compasión.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Se dice que Kwan Yin oye los gemidos de este mundo que sufre
y responde con un corazón tembloroso. Una mañana, después de un mes de mi
colapso emocional, al sentarme en frente del thanka , comencé a orar al Kwan
Yin.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Me sentí aplastada e inútil.
Las palabras de Rilke resonaban en mi cabeza profundamente: <o:p></o:p></span></span></div>
<blockquote class="tr_bq">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“Deseo con todo mi
corazón que me sostengas en las grandes manos de tu corazón. Oh deja que me lleven
ahora. En ellas deposito estos fragmentos, mi vida……..”</span></span></blockquote>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Yo quería ser
sostenida por el abrazo compasivo de Kwan Yin.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Por unos días le oré
a Kwan Yin y realmente encontré algo de confort al sentir su presencia. Pero
una mañana llegué a mi límite. ¿Qué estaba yo haciendo?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Mi continuo ritual de sentir dolor y
orar y llorar y detestar mi sufrimiento no me estaba conduciendo a una
curación.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>De repente, Kwan Yin me
pareció una idea que yo había creado para encontrar alivio. Y aun así, sin tenerla
a ella como un refugio, me encontraba sin nadie a quien acudir, nada en que
sostenerme, sin salida de este pozo vacío de dolor. Lo que era más intolerable
era que el sufrimiento parecía interminable y sin propósito alguno.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="mso-spacerun: yes;"></span></span>
<span lang="ES-TRAD"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="color: #353536; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: Arial;">Aunque parecía otra noción idealista,
recordé que a veces, en mi práctica budista, yo había experimentado con el
sufrimiento como la puerta al despertar de mi corazón. Recordé que <i style="mso-bidi-font-style: normal;">cuando yo había permanecido presente con el
dolor en el pasado, sin duda algo había cambiado. </i>Me encontraba más abierta
a una conciencia plena y bondadosa.<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>Es entonces que me di cuenta de que necesitaba dejar de luchar contra mi
pena y mi<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>soledad, sin importarme
lo horrible que me estaba sintiendo o por cuánto tiempo más iba a continuar.
Solo al experimentar el dolor plenamente podría entregarle “estos fragmentos de
mi vida” a la infinita compasión de Kwan Yin.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="color: #353536; mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: Arial;"><span style="mso-spacerun: yes;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Recordé la
aspiración del bodhisattva: “Que este sufrimiento sirva para despertar
compasión” y comencé a susurrarlo con mi voz interior. Al repetir esa oración
una y otra vez, podía sentir que mi voz interior perdía desesperación, era más
sincera.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Yo oraba no por alivio,
sino por la curación y la libertad que naturalmente aparece cuando nos abrimos
a los lugares heridos y rotos dentro de nosotros. Fue en el momento en que me
dejé penetrar en oración a esa profundidad de sufrimiento que el cambio
comenzó. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
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<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: Arial;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Ahora yo apenas podía tolerar el intenso dolor de la
separación. No anhelaba una persona en particular, lo que anhelaba era el amor.
Deseaba pertenecer a algo más grande que mi soledad. Cuanto más podía sentir el
vacío que me carcomía, en vez de resistirlo o luchar contra él, más
profundamente me abría a mi deseo de mi amado. Al estar inmersa en ese deseo,
la dulce presencia de la compasión se manifestó. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>En forma muy clara pude percibir a Kwan Yin como un campo
radiante de compasión <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>abrigando mi
ser herido y vulnerable. Al entregarme a su presencia, mi cuerpo comenzó a
llenarse de luz. Yo vibraba con un amor que cubría el mundo entero –
cubría<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>mi respiración, el cantar
de los pájaros, la humedad de las lágrimas y el cielo infinito. Disolviéndome
en esa cálida y brillante inmensidad, yo ya no sentía ninguna distinción entre
mi corazón y el corazón de Kwan Yin. Lo único que restaba era una enorme
ternura<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>con un tinte de tristeza. El
Ser Amado compasivo al que había estado buscando<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>“afuera” era en realidad mi propio ser iluminado.</span></span><span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: "MS Gothic"; mso-fareast-font-family: "MS Gothic";"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="mso-ansi-language: ES-TRAD; mso-bidi-font-family: Arial;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="p1" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">© Tara Brach</span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Disfruta de los siguientes programas de audio en español:</span></div>
<div class="p3" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p1" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Para más infomación visita me página de internet: <a href="http://www.tarabrach.com/" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span class="s1">www.tarabrach.com</span></a></span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD"></span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Si deseas recibir noticias y anuncios míos en inglés por correo electrónico, puedes inscribirte en: <span class="s1"><a href="http://eepurl.com/6YfI" style="color: #6699cc; text-decoration: none;">http://eepurl.com/6YfI</a></span></span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Traducción del inglés<a href="http://blog.tarabrach.com/2012/03/praying-from-presence-part-i.html" target="_blank"> Praying From Presence Part I</a></span></div>
Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-88237270726032321482014-02-25T14:04:00.000-08:002014-02-25T14:04:12.036-08:00Quitando las manos de los controles
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<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiT0mlAs-wG21iQWjgnaDJarFyrm2v-aAPPkg4T3xvqt6o8UwqaKcz5pXecCSvqOuRkxXUfipF9jwvhY-qIRe1rz8ewe_dshZglGPesAVaosNtMrWGSkVEiL9ia1-2jxahcp_9CATXR35uV/s1600/IMG_0643.JPG" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiT0mlAs-wG21iQWjgnaDJarFyrm2v-aAPPkg4T3xvqt6o8UwqaKcz5pXecCSvqOuRkxXUfipF9jwvhY-qIRe1rz8ewe_dshZglGPesAVaosNtMrWGSkVEiL9ia1-2jxahcp_9CATXR35uV/s1600/IMG_0643.JPG" height="320" width="275" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Foto cortesía de Kalliope Kokolis</td></tr>
</tbody></table>
<br />
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333; font-family: Arial; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: Arial; mso-fareast-language: ES-AR;">Como
organismos vivos preocupados por nuestra supervivencia, estamos naturalmente
equipados para manejar nuestras vidas con el objetivo de crear más placer y
menos dolor para nosotros mismos. Sin embargo, muchas cosas están completamente
fuera de nuestro control – el envejecimiento, la enfermedad, la muerte,
personas que mueren, otras personas que actúan de manera que no nos gusta,
nuestros propios estados de ánimo y nuestras emociones… todo está fuera de
nuestras manos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333; font-family: Arial; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: Arial; mso-fareast-language: ES-AR;">Aun
así, cuando este hábito automático de controlar se hace cargo, cuando toda
nuestra identidad está en el
personaje del Controlador, estamos alejados de las cualidades de presencia,
frescura, y espontaneidad; perdemos la capacidad de responder desde un lugar
más sabio y compasivo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333; font-family: Arial; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: Arial; mso-fareast-language: ES-AR;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333; font-family: Arial; font-size: 11.5pt; mso-bidi-font-family: Arial; mso-fareast-language: ES-AR;">
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<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11.5pt;">Puedes haber notado esto en tu propia vida. </span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Por ejemplo, cuando estás con otra persona
y te estás sintiendo ansioso, observa al Controlador en ti que está tratando de
ser <i>experimentado</i> de determinada
manera. Puedes notar que cuanto más inseguro te sientes, más entra en acción el
Controlador.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Todos
tenemos nuestra manera diferente de convertirnos en el Controlador. A veces
tratamos de controlar enmarcando o presentando las cosas de una cierta manera
para provocar una determinada respuesta. Algunos de nosotros controlamos
retirándonos. Por ejemplo, podemos encontrarnos a nosotros mismos pensando,
“Ok, si me vas a tratar de esta manera, entonces me voy a retirar.”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Otra
manera en que controlamos es por retrayéndonos en nosotros mismos, cerrándonos.
Un entrenador de fútbol habla acerca del intercambio con un ex-jugador: “Le
dije, ¿Qué pasa contigo? ¿Es ignorancia o apatía?” El jugador dijo,
“Entrenador, no sé, y no me importa.”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
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<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">También
tratamos de controlar preocupándonos. Es completamente ineficaz, pero es lo que
hacemos. Nos preocupamos y nos obsesionamos, pensamos y planificamos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Sin
embargo querer controlar las cosas es una parte natural de nuestra biología. La
pregunta es: ¿lo hacemos de una manera que causa que nuestra identidad esté
completamente envuelta en ello? A menudo, cuando tratamos de controlar todo,
tendemos a encerrarnos en una experiencia de nosotros mismos como un ser
apretado, egoísta, y perdemos la visión de quiénes somos realmente.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">En
su libro <i>Lo que hay que tener / Elegidos
para la gloria</i>, Tom Wolfe describe cómo, en la década de 1950, unos pocos
pilotos altamente entrenados estaban intentando volar a altitudes mayores a las
que jamás se habían logrado. Los primeros pilotos para enfrentar este desafío
respondieron frenéticamente tratando de estabilizar sus aviones cuando perdían control.
Podían aplicar corrección tras corrección; sin embargo, como estaban fuera de
la atmósfera terrestre, las reglas de la termodinámica ya no se aplicaban,
entonces los aviones simplemente se volvían locos. Cuanto más furiosamente
manipulaban los controles, más salvajes eran los recorridos. Gritando
impotentes a la torre de control, “¿Qué hago ahora?” los pilotos se sumergían
en su muerte.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Este
drama trágico ocurrió varias veces hasta que uno de los pilotos, Chuck Yeager,
inadvertidamente se topó con una solución. Cuando el avión empezó a caer,
Yeager fue lanzado violentamente dentro de la cabina y se desmayó.
Inconscientemente, se precipitó a tierra. Siete millas después, el avión
reingresó a la densa atmósfera del planeta donde las estrategias estándares de
navegación se podían implementar. Estabilizó el avión y aterrizó. Al hacerlo,
había descubierto la única respuesta posible para salvar vidas en esta
situación desesperada: no hagas nada. Quita las manos<a href="" name="_GoBack"></a> de
los controles.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Es
exactamente lo mismo con nosotros. Como escribió Wolfe, “Es la única solución
que tenía. Quitar las manos de los controles.”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">
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<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Con
suerte, puedes evitar estar inconsciente para descubrir esta verdad! Lo que <i>puedes</i> hacer es empezar a notar cada vez
que de alguna manera te has convertido en el Controlador, y simplemente hacer
una pausa, observar qué está sucediendo, y preguntarte, “¿Cómo es esto?” </span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11.5pt;">¿Cómo
se siente mi cuerpo? ¿Mi corazón? ¿Cómo está mi mente? </span><span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">¿Hay algún espacio? ¿Me gusto a mí mismo
cuando me identifico como el Controlador?”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Esta
pausa ofrece la posibilidad de una nueva elección. Te puedes preguntar, “¿Qué
pasaría si sólo saco mis manos del control un poco? ¿Qué pasaría si simplemente
prestara atención al momento presente, a la experiencia de estar aquí y ahora?”<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">Mientras
lentamente comienzas a sacar las manos de los controles, es importante tener
compasión a lo que sea que surja, ya que, detrás de la acción de controlar a
menudo está la ansiedad, el miedo, y a veces hasta pánico. Puede incluso ayudar
llevarte una mano al corazón, respirar con ella, y sentir que su contacto está
ofreciendo un acto de bondad y amor a esa inseguridad.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;">La
próxima vez que te encuentres de alguna manera tratando desesperadamente de
aterrizar a salvo, tu compasión puede ser lo que finalmente te brinde el coraje
necesario para soltar los controles. Al hacerlo, puedes descubrir que cada vez
que sueltas los controles,
se vuelve más y más fácil volver a entrar en la atmósfera de tu propia
vitalidad. Gradualmente llegarás a casa al flujo de tu propia presencia
viviente, al calor y al espacio de tu corazón despierto.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; background-position: initial initial; background-repeat: initial initial; margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES-AR" style="font-size: 11.5pt;"></span></div>
<div class="p1" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">© Tara Brach</span></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Disfruta de los siguientes programas de audio en español:</span></div>
<div class="p3" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p1" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Para más infomación visita me página de internet: <a href="http://www.tarabrach.com/" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span class="s1">www.tarabrach.com</span></a></span></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Si deseas recibir noticias y anuncios míos en inglés por correo electrónico, puedes inscribirte en: <span class="s1"><a href="http://eepurl.com/6YfI" style="color: #6699cc; text-decoration: none;">http://eepurl.com/6YfI</a></span></span></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
</div>
<div class="p1" style="font-family: Arial, Tahoma, Helvetica, FreeSans, sans-serif; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Traducción del inglés: <a href="http://blog.tarabrach.com/2012/02/taking-your-hands-off-controls.html" target="_blank"><span style="color: #6699cc;">T</span>aking Your Hands Off the Controls</a></span></div>
<br />
<!--EndFragment--><br />
<!--EndFragment--><br />
<!--EndFragment--><br />
<!--EndFragment-->Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-36756788616043751852014-02-06T08:24:00.004-08:002014-02-06T08:28:52.447-08:00 Un Regalo para el Alma: El Espacio de Presencia<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjFB5xagaO9245KrMBaeje9ZUT5iB9AVChNLve6Uwr1kWOuA3L24Qfmpb9nTgnsvKLVC9g6QnAbkNRuuRqD2U2RF7PUNUMYdSlPwFYCqlu672h92EGhirLIrCvy6byPp3dvj2hmHuZ_6RO0/s1600/the_road_to_the_blue+(1).jpeg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjFB5xagaO9245KrMBaeje9ZUT5iB9AVChNLve6Uwr1kWOuA3L24Qfmpb9nTgnsvKLVC9g6QnAbkNRuuRqD2U2RF7PUNUMYdSlPwFYCqlu672h92EGhirLIrCvy6byPp3dvj2hmHuZ_6RO0/s1600/the_road_to_the_blue+(1).jpeg" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Para muchos de nosotros esta es
una temporada donde se siente que vamos más y más rápido. Todo es una carrera, con</span><span class="MsoCommentReference"><span lang="ES-AR"> se</span></span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">mestres escolares, terminando compromisos
de trabajo, entrando en las fiestas; las corrientes de la vida están a toda
velocidad. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Dada la época del año, un
alumno entró en un período de estrés intenso resultante de un ciclo de clases, estudiar,
trabajar y poco sueño. No se dio cuenta de cuánto tiempo había olvidado
escribir a casa hasta que recibió la siguiente nota:<o:p></o:p></span></span></div>
<blockquote class="tr_bq">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Querido hijo,</span></span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">
Tu madre y yo disfrutamos tu última carta.</span></span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">
Por supuesto, éramos mucho más jóvenes entonces y más impresionables.</span></span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">
Amor,</span></span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">
Papá</span></span></blockquote>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Como sabes, no son sólo los
estudiantes. Hace unos meses, una amiga describió<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>este estado de ajetreo mientras se preparaba para trataba de
llevar a su hija al colegio. Ella estaba ocupada arreglando preparando las
cosas mientras su hija trataba de mostrarle algo. Cada vez que su hija la llamaba
ella decía, </span><span lang="ES-TRAD" style="color: #333333;">“Sólo espera un momento. Estaré allí en un segundo.” </span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Después de varias rondas de esto, la
pequeña de cuatro años salió de su habitación cansada de esperar. Le dijo a su
madre, con las manos en las caderas:<o:p></o:p></span></span></div>
<blockquote class="tr_bq">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“¿Por qué siempre estás tan
ocupada? ¿Cómo te llamas? ¿Presidente O´mama o algo así?”</span></span></blockquote>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Junto con la velocidad tenemos
la sensación de que no hay suficiente tiempo. Es interesante observar con qué
frecuencia vivimos con esa percepción. Generalmente se acompaña de una pizca de
ansiedad: “No voy a estar preparado,” y una cadena de inseguridades. “Hay algo
a la vuelta de la esquina que no voy<span style="mso-spacerun: yes;">
</span>a poder resolver va a ser demasiado,” “Voy a quedarme corto,” “No voy a poder
hacer algo crítico.” Hay una sensación de estar en camino a otro lugar y </span><span lang="ES-AR">lo de este momento no es importante y no</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> lo que está aquí y ahora.
Estamos tratando de llegar </span><span lang="ES-AR">a un momento</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> en el futuro cuando finalmente
hayamos hecho todo en nuestra lista de tareas y podamos descansar. Mientras
esta sea nuestra costumbre, estaremos en una carrera perpetua hacia el final de
nuestra vida. Estamos rozando la superficie, incapaces de arribar a nuestra
vida. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Thomas Merton describe el apuro
y la presión de la vida moderna como una forma de violencia contemporánea. </span><span lang="ES-TRAD" style="color: #333333;">Dice:<o:p></o:p></span></span></div>
<blockquote class="tr_bq">
<span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“…rendirse a demasiadas
exigencias, a demasiadas preocupaciones, es sucumbir a la violencia.”</span></span></blockquote>
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Cuando nos apresuramos,
violamos nuestros propios ritmos naturales de una manera que no nos permite
escuchar nuestra vida interior y estar en un campo de resonancia con otros. </span><span lang="ES-AR">Nos volvemos tensos.</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> </span><span lang="ES-AR">Nos achicamos.</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> </span><span lang="ES-AR">Anulamos</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> nuestra capacidad de apreciar la
belleza, de celebrar, de servir a otros desde el corazón.<o:p></o:p></span></span></div>
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<!--EndFragment--><br />
<div class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 12.0pt;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">Nuestra práctica de </span><span lang="ES-AR">meditación de atención plena</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> nos ofrece la oportunidad de hacer
una pausa y redescubrir el espacio de presencia. Cuando dejamos de </span><span lang="ES-AR">apresurarnos<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>para
llegar al futuro</span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> y
nos abrimos a lo que está aquí, vamos a notar un cambio radical en nuestra
experiencia de estar vivos. A medida que tocamos este espacio del </span><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-AR">aquí y ahora</span></i><i style="mso-bidi-font-style: normal;"><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"> </span></i><span lang="ES-AR" style="color: #333333;">accedemos
a una sabiduría, a un amor y a una creatividad que no están disponibles cuando
estamos en camino a otro lugar. </span><span lang="ES-AR">Nos sentimos en nuestra
íntima morada</span></span><span lang="ES-AR" style="color: #333333;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">, en
nuestra vitalidad y nuestro espíritu.</span><span style="font-family: Arial; font-size: 11.5pt;"><a href="https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=2890132643422574927" name="_GoBack"></a><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="p1">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">© Tara Brach</span></div>
<div class="p2">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Disfruta de los siguientes programas de audio en español:</span></div>
<div class="p3">
<a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></div>
<div class="p2">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p1">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Para más infomación visita me página de internet: <a href="http://www.tarabrach.com/"><span class="s1">www.tarabrach.com</span></a></span></div>
<div class="p2">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Si deseas recibir noticias y anuncios míos en inglés por correo electrónico, puedes inscribirte en: <span class="s1"><a href="http://eepurl.com/6YfI">http://eepurl.com/6YfI</a></span></span></div>
<div class="p2">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p2">
</div>
<div class="p1">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Traducción del inglés: <a href="http://blog.tarabrach.com/2013/12/gift-to-soul-space-of-presence.html" target="_blank">A Gift to the Soul: The Space of Presence</a></span></div>
Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-62478488010469025052014-01-27T12:58:00.000-08:002014-01-27T13:03:49.120-08:00Alegría poco frecuente y preciada<br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpDmOK9Hys9GgTtJ836wYm6e2BIvzuYYt5XTMAJIIK80PC60TPpDSllByKjeUXKijASSETW7mMZ0zYAGNkGiYZQYQwIhgIinduRbS6zWfaDFxD0uJyKS-RPowUVj8-9Xy4B8rIkaSGBnHo/s1600/i_loooove_this__this_was_my_fav_-1.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhpDmOK9Hys9GgTtJ836wYm6e2BIvzuYYt5XTMAJIIK80PC60TPpDSllByKjeUXKijASSETW7mMZ0zYAGNkGiYZQYQwIhgIinduRbS6zWfaDFxD0uJyKS-RPowUVj8-9Xy4B8rIkaSGBnHo/s1600/i_loooove_this__this_was_my_fav_-1.jpg" height="226" width="320" /></a></div>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Cuando hablo con la gente acerca de cuánto experimentan la alegría, la mayoría dice, “No tanto”. La alegría no es un visitante frecuente, y cuando aparece, es fugaz.</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La alegría surge cuando estamos abiertos a la belleza y al sufrimiento inherentes a la vida. Como un gran cielo que incluye todos los diferentes tipos de clima, la alegría es una cualidad expansiva de presencia. Dice “Sí a la vida, pase lo que pase!”. Sin embargo, su escasa frecuencia nos permite conocer nuestra postura más habitual: resistir lo que está sucediendo, decir “No” a la vida que está aquí y ahora. Tendemos a anular nuestra capacidad innata para la alegría con nuestro diálogo interno incesante, nuestros intentos crónicos para evitar lo desagradable y de aferrarnos al placer. En lugar de alegría en el momento presente, tratamos de llegar a otro lugar, para experimentar algo que es mejor, diferente.</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">El gran escritor Francés, André Gide, dijo:</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“Sepan que la alegría es más rara, más difícil y más bella que la tristeza. Una vez que hagas este importante descubrimiento, debes abrazar la alegría como una obligación moral.”</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La alegría es una “obligación” porque es una expresión de nuestro potencial pleno. Solo si nos comprometemos a amar la vida, entramos plenamente en nuestra totalidad. Este compromiso significa que investigamos nuestras creencias limitantes acerca de nuestra propia bondad y valor. Significa que traemos conciencia plena a nuestros pensamientos discursivos y juicios. Y significa que desafiamos los valores de una cultura que está fijada en el crecimiento material, el consumismo, y la dominación de la naturaleza.</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Hay una historia acerca de un joven monje que llega a un monasterio y es asignado para ayudar a otros monjes copiando los cánones y las leyes de la iglesia a mano. Se da cuenta que los monjes copian de copias. Va con el viejo abad para recalcar que si hubiera habido siquiera un pequeño error antes, nunca sería percibido. De hecho, el mismo continuaría en todas las copias posteriores. El abad dice, “Hemos copiado de copias por siglos, pero tienes tienes razón.” Entonces desciende a las bóvedas, en lo profundo de las cuevas debajo del monasterio donde los manuscritos originales han estado durante mucho tiempo, durante cientos de años. Las horas pasan. Nadie ve al viejo abad. Finalmente, el nuevo joven monje se preocupa mucho y baja las escaleras. Encuentra al viejo abad, golpeándose la cabeza contra la pared y llorando descontroladamente. Preocupado le pregunta, “Padre, padre, ¿qué sucede?” Y en una voz ahogada, el viejo abad responde, “La palabra era celebre! (no célibe).”</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Cuando nos perdemos en conductas habituales –viviendo de acuerdo a las expectativas de otros, evitando riesgos, no cuestionando nuestras creencias- evitamos las oportunidades de celebrar la vida. La alegría sólo es posible si estás viviendo en tu cuerpo, con tus sentidos despiertos. Un entrenamiento que cultiva tu capacidad para la alegría es detenerte intencionalmente cuando tienes el mínimo brote de la sensación de “Ah… felicidad.” Cada vez que comienzas a sentir algún placer simple, a sentir algo que aprecias, detente. Se plenamente consciente de tu cuerpo, de la sensación y de estar vivo. Se consciente de tu corazón. Siente cómo es saborear plenamente la belleza de una hoja que cae, el calor de un abrazo, la tranquilidad al amanecer. No somos una cultura de saborear. Nos aferramos a nuestros placeres, pero no hacemos una pausa. No pasamos mucho tiempo con nuestros sentidos despiertos.</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Observa qué sucede si te comprometes a amar la vida. Comienza por recordar hacer una pausa y saborear los placeres simples. Ten la intención de sostener suavemente las dificultades. Abre tu corazón a la vida de este momento y descubre que la alegría nunca está muy lejos.</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">© Tara Brach</span><br />
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span>
<br />
<div class="p1" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Disfruta de los siguientes programas de audio en español:</span></div>
<div class="p3" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="p1" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Para más infomación visita me página de internet: <a href="http://www.tarabrach.com/" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span class="s1">www.tarabrach.com</span></a></span></div>
<div class="p2" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px; margin-bottom: 0.0001pt;">
</div>
<div class="p1" style="background-color: white; color: #333333; font-size: 15px; line-height: 20.790000915527344px;">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Si deseas recibir noticias y anuncios míos en inglés por correo electrónico, puedes inscribirte en: <a href="http://eepurl.com/6YfI" style="color: #6699cc; text-decoration: none;"><span class="s1">http://eepurl.com/6YfI</span></a></span></div>
<br />
Traducción del inglés: <a href="http://blog.tarabrach.com/2013/05/when-i-talk-to-people-about-how-much.html" target="_blank">Rare and Precious Joy </a>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-85924787221037234112014-01-16T07:56:00.000-08:002014-01-16T07:56:07.199-08:00Desplegando las Alas de la Aceptación<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhofe4l0v__Aigx5TsxoaLsmTAcIaa-_9Q9N-TiS7kcwY2yjlEBe6LSG6BgZVVljG0ev20HwwORW_1jIPtqmPiSnoUsYMNWpscwj0DPiqfTNDzC0fIdD1KcMQfBKlvoGDvjNQxfA2XC1vIe/s1600/dreamstimefree_194154.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhofe4l0v__Aigx5TsxoaLsmTAcIaa-_9Q9N-TiS7kcwY2yjlEBe6LSG6BgZVVljG0ev20HwwORW_1jIPtqmPiSnoUsYMNWpscwj0DPiqfTNDzC0fIdD1KcMQfBKlvoGDvjNQxfA2XC1vIe/s1600/dreamstimefree_194154.jpg" /></a></div>
<span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Cuando nos vemos atrapados en el </span><i style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">trance </i><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">de no sentirnos válidos, no reconocemos claramente lo
que está pasando dentro de nosotros, ni tampoco </span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">sentimos </span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">b</span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">ondad hacia nosotros mismos. Nuestra auto-percepción
está distorsionada y limitada, y nuestro corazón se siente endurecido hacia la
vida. Al apoyarnos en la experiencia del momento presente—soltando nuestras
historias y suavemente abrazando nuestro dolor o deseo—la Aceptación Radical
empieza a desplegarse.</span><br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES" style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Las dos partes de la auténtica aceptación—ver
claramente y abrazar nuestra experiencia con compasión—son tan
interdependientes como las dos alas de un gran pájaro. Juntas, nos permiten
volar y ser libres.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">El ala de la visión clara se describe a menudo
en la práctica budista como atención plena o <i>mindfulness</i>. Esta es la cualidad de conciencia que reconoce
exactamente qué está ocurriendo en este momento. Cuando somos conscientes del miedo,
nos damos cuenta de la velocidad con la cual tenemos pensamientos. Empezamos a
notar que sentimos nuestro cuerpo rígido y tembloroso, el impulso a huir de
nosotros mismos. La clave es reconocer todas estas experiencias sin tratar de manipularlas
de ninguna manera, sin alejarnos sino observarlas con compasión.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">La atención plena es incondicional y
abierta. Nos permite estar con lo que surja, sea lo que sea, incluso
si deseamos que el dolor se acabe o que podríamos estar hacienda otra cosa.
Este deseo y este pensamiento se vuelven parte de lo que estamos aceptando.
Como no estamos tratando de manipular nuestra experiencia, la atención plena
nos permite ver la vida “tal como es<span style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">. </span>Este reconocimiento de la realidad de nuestra experiencia es intrínsico
a la Aceptación Radical: No podemos aceptar honestamente una experiencia a
menos que veamos claramente qué estamos aceptando.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">La segunda ala de la Aceptación Radical, la
compasión, es nuestra capacidad de relacionarnos de una manera tierna y comprensiva
con lo que percibimos. En lugar de resistirnos a nuestras sensaciones de miedo
o dolor, abrazamos nuestro dolor con la dulzura de una madre sosteniendo a su
hijo. Más que juzgar o complacer nuestro deseo de atención, sexo o chocolate, vemos
nuestro desespero con dulzura y cuidado. La compasión honra nuestra
experiencia, nos permite tener una relación íntima, profunda, con la vida de
este momento tal como es.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">Las dos alas de la visión clara y de la
compasión son inseparables; ambas son esenciales para liberarnos del <i><span style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">trance</span></i>. Las dos alas trabajan juntas, apoyándose mutuamente.
Si somos rechazados por alguien que amamos, el <i>trance</i> de que “no valgo nada” o “no soy digno” puede atraparnos en
un pensamiento obsesivo, culpando al que nos ha hecho daño, creyendo que nos
dejaron plantados porque <span style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">somos
defectuosos</span>. Puede que nos sintamos atrapados en una alternancia
incansable entre una ira explosiva, un dolor desgarrador y vergüenza. Las dos
alas de la Aceptación Radical nos liberan de este remolino de reacción. Nos
ayudan a encontrar el equilibrio y la claridad que pueden ayudarnos a elegir qu<span style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">e</span> decimos o hacemos.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">Si solo nos enfocáramos en el ala de la atención
plena en nuestro proceso de Aceptación Radical, tendríamos una consciencia
clara del dolor en nuestro corazón, del calor de la rabia en nuestra cara;
podríamos ver claramente las historias que nos contamos a nosotros mismos- que
somos una víctima, que siempre estaremos solos y sin amor.</span><span lang="ES"><o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">Quizás también estaríamos agravando nuestro
sufrimiento al enfadarnos con nosotros mismos por haber llegado a esta
situación. Aquí es donde el ala de la compasión se une con la atención plena
para crear una auténtica presencia sanadora. En lugar de rechazar o juzgar
nuestra ira o nuestro abatimiento, la compasión nos permite estar presentes de
manera suave y amable con nuestras heridas abiertas. De la misma manera, la
atención plena equilibra la compasión<b>.</b>
Si nuestra actitud de cuidado sentida desde el corazón empieza a convertirse en
sentir lástima por uno mismo, dando lugar a otra <i>historia</i>- “lo hemos intentado con tanto esfuerzo pero no hemos
conseguido lo que tanto queríamos” - la atención plena nos permite ver la
trampa en la que estamos cayendo.</span><span lang="ES"> </span><span lang="ES">Ambas alas juntas nos ayudan a permanecer en la
experiencia del momento, tal como es.<o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES" style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Cuando hacemos esto, lo que
empieza a suceder es que nos sentimos más libres, notamos que hay más de una
opción, vemos con más claridad cómo queremos proceder. La Aceptación Radical
nos ayuda a sanarnos y a continuar, libres de los hábitos inconscientes de
autodesprecio y culpa.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span lang="ES" style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Gradualmente, a medida que <span style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">dejamos ir</span> de nuestras historias sobre “qué está mal
con nosotros”, podemos empezar a sentir lo que realmente está ocurriendo con
una atención clara y amable. Soltamos nuestros planes o fantasías y llegamos
con las manos abiertas a la experiencia de este momento. Ya sea que sintamos
placer o dolor, las alas de la aceptación nos permiten honrar y apreciar esta
vida en constante cambio, tal como es.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES">Traducido de mi libro </span><i><span lang="ES" style="background-position: initial initial; background-repeat: initial initial;">Radical Acceptance (2003)</span></i></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt;">
<span style="background-color: white;"><i><span lang="ES"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></i></span></div>
<div class="p1">
<span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">© Tara Brach</span></div>
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<!--EndFragment-->Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-17670134847572244592014-01-08T07:15:00.002-08:002014-01-09T07:33:36.388-08:00Un Gesto de Amabilidad<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3GafQSB615VoYqn5-4uW6Vmv6dEBPIEwJqqf8EEfJgDuaspogXtosTT8D-etkSkgkVyp4iv-0onLpeDpxKs3GsEFMTXxz8Y0JYt2SFK4W5_VQHx-z8AngQ8qmz8f3rHZjiLW2uV8c-ae3/s1600/dreamstimefree_2306628.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3GafQSB615VoYqn5-4uW6Vmv6dEBPIEwJqqf8EEfJgDuaspogXtosTT8D-etkSkgkVyp4iv-0onLpeDpxKs3GsEFMTXxz8Y0JYt2SFK4W5_VQHx-z8AngQ8qmz8f3rHZjiLW2uV8c-ae3/s1600/dreamstimefree_2306628.jpg" height="213" width="320" /></a></div>
La próxima vez que te encuentres de mal humor o en un momento de auto-crítica, tómate un momento para detenerte y pregúntate a ti mismo, “¿Cuál es mi actitud hacia mí mismo ahora? ¿Me estoy juzgando? ¿Me estoy tratando con conciencia, afecto, y respeto?”<br />
<br />
Normalmente, descubrirás que cuando te sientes ansioso, solo, o deprimido, también te estás criticando a ti mismo de alguna manera, y es esta corriente subconsciente, de sentirte deficiente o no merecedor, lo que te mantiene separado de tu propia vitalidad, así como de tu sentimiento de conexión con los demás.<br />
<br />
El camino de sanación hacia el centro de tu ser, empieza con lo que yo llamo “un gesto de amabilidad.” Por ejemplo puedes poner tu mano en tu corazón—con calma y auto-compasión—y decirte: “Está bien, estoy aquí para apoyarte,” “cuido de este sufrimiento,” “lo siento y te amo”. A menudo, al reconocer que lo que nos sucede es parte de la vida y todo es pasajero podemos decir: “Esto, también.”<br />
<br />
A veces, este gesto de amabilidad incluye decir “sí” a lo que sea que esté ocurriendo—el “sí” significa “Esto es lo que está ocurriendo, es como la vida es ahora mismo…está bien.” Aceptando el momento presente, nos detenemos tomando conciencia, para así poder actuar en vez de reaccionar.<br />
<br />
Si realmente estás criticándote, también puedes decir: “Perdonado, perdonado.” No porque haya algo malo que perdonar, sino porque hay una auto-crítica de la cual hay que desprenderse.<br />
<br />
Mientras te ofreces a ti mismo este gesto de amabilidad, toma algunos momentos para estar contigo mismo, para mantener tu propia compañía. Permite que surja a la superficie lo que requiera más atención, y siente que tú eres la presencia amorosa capaz de incluir y abrazar lo que está surgiendo.<br />
<br />
Luego, mira si puedes ampliar tu atención, y date cuenta qué o quién más está presente en el espacio de tu corazón. Quizá ofrecerás intencionadamente un gesto de amabilidad a un amigo que lo está pasando mal, a un miembro de tu familia con una enfermedad, o a un adolescente sin confianza en si mismo. Es tan simple como decir en voz alta o mentalmente: “Espero que estés bien, que seas feliz, que la vida te llene de amor.”<br />
<br />
A medida que continúes con la práctica de ofrecerte a ti mismo y a los demás este gesto de amabilidad, descubrirás que responder a la vida de esta manera se vuelve cada vez más espontánea y natural. De aquí un tiempo, la reconocerás como la expresión más auténtica de quien tú realmente eres.<br />
<br />
© Tara Brach<br />
<br />
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Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-91144927504688559892012-07-27T07:55:00.003-07:002012-07-27T07:55:36.620-07:00Viviendo de todo corazón<br />
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Las
personas más felices que conozco tienen algo en común: encaran la vida de todo corazón,
ya sea que estén meditando, jugando o trabajando. Tienen la capacidad de dar de
si mismos completamente en el momento presente.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">A muchos de
nosotros nos cuesta vivir la vida con este nivel de presencia. Aquí hay un
ejemplo:<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<i><span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Se regala: un pequeño gato de color anaranjado
acaramelado, seis meses de edad, juguetón,
amigable, ideal para una familia con niños o joven y guapo marido de 32 años,
llevadero, gracioso, con buen trabajo pero no le gustan los gatos. Él o el gato
se van. Llame a Jennifer y escoja uno de los dos.<o:p></o:p></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<i><span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></i></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6KPrrXu0RRK72Q-ehQmxMdm79WVfZKmVNqbDnKFz3-WbxLORfbc5IXWHjBTKqHVxz1DfiQn4nkCs4375ggGP1LwYCUIguGLcR8EmkFlXmXb5DCXgqjkYB4AMNp-pRZ-5U-RULCbaoVwDI/s1600/Nina.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj6KPrrXu0RRK72Q-ehQmxMdm79WVfZKmVNqbDnKFz3-WbxLORfbc5IXWHjBTKqHVxz1DfiQn4nkCs4375ggGP1LwYCUIguGLcR8EmkFlXmXb5DCXgqjkYB4AMNp-pRZ-5U-RULCbaoVwDI/s1600/Nina.jpg" /></a><span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Con cu</span></span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">á</span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">nta
frecuencia vemos que nuestras relaciones, en vez vivirlas con una presencia de
amor, las afrontamos con la idea de cambiar a la otra persona o ser diferentes?
¿Cuán a menudo notamos que nuestras inseguridades no nos dejan ser espontáneos,
francos, o dar todo nuestro corazón? Piensa en una relación importante en tu
vida y pregúntate: ¿Qué se interpone entre mí y mi habilidad de estar completamente
presente con esta persona? Observa que pensamientos te vienen a la mente: el
miedo de no ser lo suficiente, el sentir de que </span><i style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">no hay suficiente tiempo</i><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">, el querer que las</span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> </span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">cosas sean de una cierta manera. </span><span style="background-color: white; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> </span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Este mismo
tipo de condicionamiento se ve reflejado en todos los aspectos de nuestras
vidas a tal punto que forma parte de la manera en la cual nuestros cerebros han
ido evolucionando. Para sentirnos al mando necesitamos controlar las cosas.
Tratamos de evadir las desilusiones y prevenir que las cosas nos salgan mal.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Si dejamos
que este condicionamiento dirija nuestras acciones, nos perdemos gran parte de
la vida. Carl Jung dijo: “Nada tiene mayor influencia sicológica, en nuestros
círculos sociales, especialmente sobre nuestros niños, que la vida <i>no vivida </i>de los padres.” La vida <i>no vivida </i>se va acumulando en aquellos
momentos en los cuales no vivimos de todo corazón, en los momentos en los
cuales estamos ocupados, yendo de prisa o tratando de no sentir o evadir
nuestros sentimientos. La vida <i>no vivida </i>también
es producto de las relaciones personales en las cuales no nos permitimos llegar
un nivel de intimidad en el cual reconocemos nuestras emociones. La vida <i>no vivida </i>es aquella pasión, sueño o
aventura que no seguimos. La vida <i>no vivida </i>ocurre como mecanismo de auto-protección
contra el sufrimiento pero termina llevándonos al mismo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Lo que yo
me he dado cuenta, al conversar con otras personas, es que para poder vivir de
todo corazón uno necesita estar dispuesto a dejar de controlar. Al dejar ir de nuestra
manera típica de aferrarnos y protegernos nos liberamos a poder expresarnos con
vitalidad, creatividad y amor. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Si es que
experimentamos con la idea de <i>dejar ir
del control, </i>si nos proponemos a vivir de todo corazón, nuestro ser se
expande. De esta manera vamos descubriendo el cariño y curiosidad innatos que
nos llevan a entregarnos completamente al presente momento a momento. En vez
que correr a la meta final, escogemos, de todo corazón, estar aquí para nuestra
vida. </span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">Más información disponible en: </span></span><span class="Apple-style-span" style="background-color: white; color: #333333; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #336699; text-decoration: none;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a></span></span><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> </span><o:p></o:p></span></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-54709259610362312122012-07-16T09:27:00.003-07:002012-07-16T20:13:29.764-07:00Compasión<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Esta es una de mis historias preferidas.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Una tarde, un perro que nunca había visto apareció en mi
jardín. Se veía muy cansado el pobre. Como si nos conociécemos desde siempre,
vino detrás mío por la puerta principal y se entró. Se fue por el pasillo principal
hacia la sala de estar, se acostó en el sillón y tomó una siesta de una hora.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Ya que ni a mi ni a mis perros nos incomodaba su
presencia y parecía ser un buen perro, decidí dejarlo dormir. Pasada una hora,
se levantó, fue hacia la puerta y me pidió que lo dejase salir. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Curiosamente, el próximo día, el mismo perro estaba de vuelta.
Fue directamente hacia el sillón, se acomodó como el día anterior y tomó otra
siesta de una hora. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Esto continuó por varias semanas. Finalmente, ya que
tenía curiosidad por saber más, enganché una nota en su collar diciendo: “Cada
tarde su perro viene a mi casa para tomar un siesta. A mí no me molesta en lo absoluto.
Sólo quisiera asegurarme que usted esté al tanto.”<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibcWSYyksr7Mx5Irt0bEQe2UdmldlR8v6wwQGsn7EeNMCza-muxstjSLCuq5kdpuGgLYDNutiUCczDAjbyPSQbbfqsJ9pgQKYcYGAH9Kx437mLh6G57s6uDc2YAudIGKeUns_2hNJeCpSW/s1600/perro+dumiendo.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibcWSYyksr7Mx5Irt0bEQe2UdmldlR8v6wwQGsn7EeNMCza-muxstjSLCuq5kdpuGgLYDNutiUCczDAjbyPSQbbfqsJ9pgQKYcYGAH9Kx437mLh6G57s6uDc2YAudIGKeUns_2hNJeCpSW/s320/perro+dumiendo.jpg" width="213" /></a><span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">El próximo día mi nuevo amigo canino llegó con una nota
diferente enganchada a su collar. La nota decía: “Él vive en un hogar con tres
niños. Está tratando de recuperar el sueño perdido. Podría yo venir mañana junto con él?”<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">La compasión puede ser descrita como el dejar ser tocados
por la vulnerabilidad y el sufrimiento que existen dentro de nosotros y todos
los seres viventes. El florecer de la compasión en nuestras vidas también require
de acción. No solamente debemos sintonizarnos a la presencia del sufrimiento
sino también responder a la misma.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Hay una expresión que me encanta: “Sé amable, todo el
mundo está luchando en la vida.”</span></span><br />
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> </span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">No importa qué edad tengamos, si es que estamos en un
cuerpo humano, en el planeta Tierra, muchas veces las cosas no son fáciles. No
quiere decir que siempre tengamos que luchar o que la vida sea mala. A lo que me
refiero es que a veces en la vida hay retos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Nuestro condicionamiento social es tal que
rehuimos al sufrimiento. El despertar con un corazón de compasión requiere una
sincera intención y voluntad de practicarla. Puede ser un proceso simple. En el transcurrir de tu día, cuando te encuentres con diferentes personas, ve lo
suficientemente despacio para preguntarte: <span style="background-color: white;">¿</span>Cómo
será la vida para esta persona? <span style="background-color: white;">¿Qué será lo que
más necesita esta persona?<o:p></o:p></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="background-color: white;"><br /></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="background-color: white; line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Si profundizas tu atención, encontrarás
que todos a los que conoces viven con vulnerabilidad. Todos viven con miedo,
han experimentado pérdidas e incertidumbre. Todos, a un cierto nivel, necesitan
sentirse seguros, amados y ser vistos.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="background-color: white; line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="background-color: white; line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Sé amable, ve despacio y presta
atención.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="background-color: white; line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></span></div>
<span lang="ES-TRAD" style="line-height: 115%;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Más información
disponible en: <a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a></span></span>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-84428505700598203542012-07-11T07:34:00.001-07:002012-07-11T07:34:58.292-07:00La cooperación absoluta con lo inevitable<br />
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">El místico jesuita,
Anthony de Mello, dijo una vez: “La iluminación de nuestro ser es el resultado de
la cooperación absoluta con lo inevitable.” Esta frase me hace reflexionar. Me
parece que significa vivir de un modo en el cual estamos completamente abiertos
hacia la vida tal y como es. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">En el
océano Atlántico la corriente del Golfo fluye de la punta de la Florida
bordeando la costa este de los Estados Unidos. Si uno pusiese una espiga
alineada con el flujo de la corriente, flotaría con la corriente en dirección
del norte. La espiga estaría en alineamiento, en un estado de gracia. Si no
estuviese alineada con el fluir de la corriente, giraría sin control y no
seguiría la corriente.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_CZBG5Shk3NVZMb0GVWZFPqSN3DyTlyWazi1par1SCdOm0IULvNXgT8C9Ql-Qs2L0lSe3MWYgKld6BtT4AoRpvYXjd_nnkvcp3s-qsFBFY1XaGyZ3p0BgxmqPsgRCxhcl7_ow08zAUsiA/s1600/tumblr_m0ue9grpxn1royzwio1_500_mermaid.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="211" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_CZBG5Shk3NVZMb0GVWZFPqSN3DyTlyWazi1par1SCdOm0IULvNXgT8C9Ql-Qs2L0lSe3MWYgKld6BtT4AoRpvYXjd_nnkvcp3s-qsFBFY1XaGyZ3p0BgxmqPsgRCxhcl7_ow08zAUsiA/s320/tumblr_m0ue9grpxn1royzwio1_500_mermaid.jpg" width="320" /></a><span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Alinearnos
con el fluir de la vida es parte esencial de nuestra práctica de <i>meditación de conciencia</i>. De igual modo
que la espiga, si nosotros no estamos alineados con el fluir de la vida,
giramos fuera de control, en un estado de reacción, incapaces de sintonizarnos hacia
la gracia divina. Al dejar que la vida fluya a través nuestro, nos mantenemos
en alineamiento.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿De qué
maneras perdemos nuestra conexión con el fluir de la vida?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Mientras
volvía a casa el otro día en mi automóvil noté lo siguiente. Tengo la costumbre
de ir a una cierta velocidad. La persona delante mío iba despacio, demasiado
despacio según yo. Ustedes conocen esa sensación ¿no es verdad? Yo no iba de
prisa, no es que tenía una cita o un vuelo que tomar. Aún así empecé a sentirme
impaciente y ansiosa. Con todo mi ser quería ir más rápido y no estaría
contenta hasta que la situación cambiase.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">En aquel
momento hice una pausa mental. Me di cuenta que estaba luchando contra el
momento presente e intenté dejar ir ese deseo. Este es un ejemplo pequeño de lo
que sucede de varias maneras en nuestra experiencia humana. Nos quedamos
trancados pensando que la felicidad no es posible sino hasta que cambien las
cosas. Por ende, nos causamos tremenda infelicidad a nosotros mismos porque continuamente
demandamos que las cosas sean diferentes.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Es interesante
darnos cuenta cómo sucede esto o de dónde proviene el sentimiento. Me parece
que es resultado del condicionamiento social en relación a los que nos trae
felicidad. Crecemos creyendo que necesitamos ciertas cosas para ser felices.
Por ejemplo decimos: “Si me dieran esa posición…si ganase tal monto…si sólo
pudiese vivir en tal sitio... entonces sería feliz.” También pensamos: “Si sólo
estaría más saludable…delgada…musculoso…cambiase de jefe o pareja.” La lista
nunca termina.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Pasamos la
vida esperando a que nuestra situación mejore para poder sentirnos contentos. Mientras
sigamos pensando que nuestra felicidad depende de los eventos externos de
nuestra vida, los cuales cambian continuamente, siempre estaremos esperando el
momento perfecto.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Qué
pasaría si pausáramos y nos alineáramos con la fluir de la vida?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Qué pasaría
si nos moviéramos con el flujo de lo que sucede en este momento?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Qué
significaría esto en tu vida aquí y ahora?<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghuozhxqAHqKyttuLyr2lmhdxOOO6OgoygsphS2JkJSuQ5N8bVuWJjHiGsy_Y3WvmwfS5UsM26FbnpDsUKKceov8yH57WOaWprw5Vcqnby78brerwicQ0BZKTH3JHOHmEmsSfleduo_Nwn/s1600/CloudsSky.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEghuozhxqAHqKyttuLyr2lmhdxOOO6OgoygsphS2JkJSuQ5N8bVuWJjHiGsy_Y3WvmwfS5UsM26FbnpDsUKKceov8yH57WOaWprw5Vcqnby78brerwicQ0BZKTH3JHOHmEmsSfleduo_Nwn/s1600/CloudsSky.jpg" /></a><span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Alinearnos
con lo que está aquí y ahora es una manera de <i>practicar presencia</i>. Nos ayuda a actuar en la vida con creatividad
y compasión. De esta manera creamos una apertura mediante la cual podemos conectarnos
con la <i>inteligencia universal, el amor
universal, </i>dejándolo fluir por nuestro ser. Cuando la espiga está alineada
con la corriente, ésta fluye a través de ella. Cuando nos alineamos con el
fluir de nuestras vidas, hay una sabiduría universal, un amor que fluye a
través nuestro que nos conecta con nuestra naturaleza eterna.</span><o:p></o:p></span><br />
<span lang="ES-BO"><span style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br /></span></span><br />
<span lang="ES-BO"><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">Más información disponible en: </span></span><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #336699; text-decoration: none;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a></span></span>
</span></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-13695069753206169062012-04-26T09:13:00.000-07:002012-04-27T05:50:37.944-07:00Navegando en kayak: encontrado una manera de estar con el miedo<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">La
mayoría de nosotros vivimos con mucha tensión, a causa del miedo o la manera en
la que lidiamos con el. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Tememos
que:<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<ul>
<li><span style="text-indent: -0.25in;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">algo malo vaya a pasar </span></span></li>
<li><span style="text-indent: -0.25in;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">no valgamos lo suficiente</span></span></li>
<li><span style="text-indent: -0.25in;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">no seamos queridos o amados</span></span></li>
<li><span lang="ES-TRAD" style="text-indent: -0.25in;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">vayamos a perder algo importante
o querido</span></span></li>
</ul>
<br />
<div class="MsoNormal">
<span class="apple-style-span"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">¿A
qué temes? ¿Por qué tienes miedo? ¿De qué maneras entra el miedo en tu vida?</span><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgMcme9d2LNQ5Wv6pgkgxCeyMo2Az0N-8RIilYT4_zAr_MPozXCVonTAd1UgmnfiT99jbOzIxbHQQ52S5CnXHztQ7CYmFHglSEGZ_ENjoNBaRP0aWE0G0itfLyFSuuNqHq4h7Q3_8bNQjGt/s1600/tara_kayak_pic.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgMcme9d2LNQ5Wv6pgkgxCeyMo2Az0N-8RIilYT4_zAr_MPozXCVonTAd1UgmnfiT99jbOzIxbHQQ52S5CnXHztQ7CYmFHglSEGZ_ENjoNBaRP0aWE0G0itfLyFSuuNqHq4h7Q3_8bNQjGt/s1600/tara_kayak_pic.jpg" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Yo en mi kayak</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal">
<span class="apple-style-span"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">La
clave para estar con el miedo es contactar lo que está aquí ahora en nuestras
vidas, en vez de intentar evadirlo. La siguiente historia ilustra esta idea y
nos ayuda a entenderla.</span></span></span><br />
<span class="apple-style-span"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD"><br /></span></span></span><br />
<span class="apple-style-span"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">Al navegar en kayak, uno puede toparse con los torbellinos
en el agua. Este espiral de agua puede , con su rápido girar atrae a todo lo que esté flotando cerca y lo tira hacia abajo. Uno puede ahogarse al estar atascado en la fuerte corriente
de agua. La única manera de liberarse del torbellino es sumergirse en el
centro del espiral, llegando al punto más profundo, cerca del suelo. Al llegar
al centro, al punto más profundo, se puede salir por la parte lateral del
espiral. </span><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span class="apple-style-span"><span lang="ES-TRAD">Esto
se logra al hacer lo opuesto de lo que nuestros instintos nos dicen. Nuestro
instinto es salir del agua, luchar contra la corrienta para llegar a la superficie. Pero en este
caso, no funciona, porque el espiral sigue tirando hacia abajo. La clave es
dejar que nos lleve hacía el centro del espiral. </span></span><span lang="ES-TRAD"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Es así con el miedo. Nuestros instintos nos dicen
que evadamos el miedo para poder ignorarlo o distraernos.
Es natural querer evadir la aparente fuerza del miedo, la sensación incomoda que se genera en nuestro cuerpo.
Sin embargo, la manera eficaz de relacionarse con el miedo es enfrentarlo con presencia. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Tenemos que contactarlo directamente. <i>No hacemos esto si el miedo es el resultado
del trauma. Puede que sea demasiado agobiante. Si la situación se trata de
trauma, es preferible pedir que alguien te ayude con este miedo--un amigo, un
consejero, un terapeuta, un curandero. </i> Puedes intentar encontrar un pensamiento que
te hace sentir miedo, un miedo no muy fuerte. En esta situación, déjate sentir
la sensación que surge. Respira con el miedo, llevando tu respiración hacía el
sitio dónde lo sientes en el cuerpo, convive con el miedo y las sensaciones que
son producidas por un momento. Al exhalar, deja que el miedo salga del cuerpo
hacia el gran espacio a tu alrededor, el océano de esta vida, la inmensidad del
universo. Ve al miedo saliendo, entrado en un espacio más grande. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Cuando navegamos en kayak en el mar, o en un
lago, podemos sentir que formamos parte de este gran espacio. Deja que el miedo
se disperse en este gran espacio. Cuando tomamos conciencia que formamos parte
del gran mar de la vida, tenemos la habilidad de relacionarnos con el miedo en
vez de evadirlo. Nos damos cuenta que somos extensos como el mar y no solamente las olas.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Más información disponible en: </span></span></span><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #336699; text-decoration: none;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></span></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-38598283314800970452012-04-06T09:42:00.000-07:002012-04-27T05:51:10.114-07:00No tengo que creer en mis pensamientos<div class="MsoNormal" style="margin: 0in 0in 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;">La conciencia plena no pide que eliminemos los pensamientos. Nos pide reconocer los pensamientos para no caer en un trance, el trance creado por los pensamientos. Hay una gran diferencia entre no pensar de ninguna manera y no creer en los pensamientos. Reconocer lo que pensamos y la manera en que pensamos nos ayuda. Podemos parar y decir, “pensando, pensando, estoy pensando ahora.” O de la misma manera, “preocupándome, preocupándome.” “planeando, planeando.” Si identificamos los pensamientos, tenemos mejor habilidad para darnos cuenta de lo que pasa en el momento presente. Llegamos a notar las sensaciones en el cuerpo, la respiración, los sonidos al alrededor nuestro, la vida que está aquí delante nuestro. </span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin: 0in 0in 0pt;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;">Cuando practicamos la consciencia plena, notamos nuestros pensamientos. Esta observación nos da la oportunidad de nombrarlos y determinar que en general <i style="mso-bidi-font-style: normal;">nuestros pensamientos no nos sirven. </i>La verdad es que muchos están basados en el miedo y promueven la inseguridad. Durante nuestros retiros espirituales de meditación, muchas personas nos dicen: </span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0pt; margin-left: 0in; margin-right: 0in; margin-top: 0in; text-align: center;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;">“Me he dado cuenta que no tengo que creer en mis pensamientos.”</span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><br /></span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"></span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiq8E6fZ6M7x0OmmgG-8zXpR22_fsnL1TF55hnsKeWdytXsAJufEv4WmxJzGGqz4xI0RifvHZWtcOohyXj6b2HkBVdnVdfOrhT0zhdUn4B8_NLCcrCSDyxUQ8nhxXmbnQrhGkYvxjKMLi8a/s1600/CherrySunset.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><img border="0" height="184" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiq8E6fZ6M7x0OmmgG-8zXpR22_fsnL1TF55hnsKeWdytXsAJufEv4WmxJzGGqz4xI0RifvHZWtcOohyXj6b2HkBVdnVdfOrhT0zhdUn4B8_NLCcrCSDyxUQ8nhxXmbnQrhGkYvxjKMLi8a/s320/CherrySunset.jpg" width="320" /></span></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Foto: Shell Fischer</span></td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">Practicando la conciencia plena nos cambia la
mente. Nos da la oportunidad de hacer una pausa. Cuando hacemos una pausa, nos
damos cuenta de que <i>la mayoría de los
pensamientos no nos sirven. </i> Y así, tenemos
la oportunidad de regresar a la presencia en cada momento. El proceso de elegir entre los pensamientos y
la presencia llega a ser aún más poderoso cuando nos damos cuenta que nuestros
pensamientos pueden hacernos sufrir y crear separación. Los pensamientos crean
un grupo de “nosotros” y otro grupo de “ellos.” Nos hacen juzgar y nos hacen
sentir mal, bajando nuestra auto-estima. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">En aquellos momentos cuando estamos perdidos
en el mundo de los pensamientos, ¿Qué pasaría si pudiéramos hacer una pausa y
decir, “Bueno. Sólo es un pensamiento.” Sería algo revolucionario. Nos puede
cambiar la vida. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">Ahora, la parte clave es acercarnos a este
paso con ternura y cariño. Cada vez que reconocemos el acto de pensar y volvemos
al presente con ternura y cariño, sembramos una semilla de conciencia plena. Adoptamos
la costumbre de vivir de una manera diferente en nuestro mundo. Calmamos los
pensamientos en nuestra mente. Nos refugiamos en lo verdadero – la vida y la
ternura del momento presente – nos liberamos de la historia creada por los
pensamientos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">“Diez mil flores en la primavera, la luna en
el otoño, <o:p></o:p></span></span></div>
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">
</span></span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Una brisa fresca en el verano, la nieve en el
invierno. <o:p></o:p></span></span></span></div>
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">
</span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Si no hay cosas innecesarias en tu mente, <o:p></o:p></span></span></span></div>
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;">
<div class="MsoNormal" style="text-align: left;">
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Es la mejor estación de tu vida.”— Wu Men</span></span><br />
<br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Más información disponible en: </span></span></span><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #336699; text-decoration: none;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></span></span></span></span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> </span><o:p></o:p></span></div>
<br />
<br />
</span></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-19938601411804812852012-03-20T11:55:00.006-07:002012-03-21T12:01:53.731-07:00Hacer una pausa y prestar más atención<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">El siguiente pasaje es de en un artículo de la revista del New York Times de hace algunos años.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">William C. Moyers, partidario de la rehabilitación (y el hijo del periodista Bill Moyers) quién ha estado libre de drogas y alcohol por doce años, fue invitado para hablar en un congreso de M.I.T. En una sala llena de científicos e investigadores obsesionados con los detalles del cerebro humano, Moyers dio una charla en la que les recordó que curando una adicción puede ser aún más difícil de lo que pensaban. </span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“Yo tengo una enfermedad con sus orígenes en el cerebro…pero también he sufrido con otro aspecto de esta enfermedad,” les contó a los investigadores y científicos, y algunos estaban apuntando lo que decía. “Yo nací con lo que me gusta llamar un vacío en mi alma…un dolor que venía de la idea de que yo no valía nada y lo que hacía nunca era suficiente. Pensaba que no merecía nada. Si alguien no me prestaba atención pensaba que a lo mejor no le caía bien.”</span><br />
<div style="margin-bottom: 0px; margin-left: 0px; margin-right: 0px; margin-top: 0px;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></div><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Un silencio profundo tomó la sala. “Para nosotros, los adictos,” continuaba, la </span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">rehabilitación</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> es más que sólo tomar una pastilla o recibir una inyección...la </span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">rehabilitación</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> también tiene que ver con el espíritu, prestando atención al vacío que tenemos en el alma.”</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Qué es un vacío en el alma? Es un deseo de conectarse con otros, un deseo de comunión, de unidad, una añoranza de darnos cuenta de quiénes somos. Es un deseo de saber que somos queridos, un deseo de identificarnos como alguien amado. No son sólo los adictos quiénes tienen el vacío en el alma ya que todos podemos reconocer algo de esto en nuestras vidas.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Cómo sanar el vacío en el alma? Todos tenemos una añoranza de ser amados, de libertad, de creatividad, de alegría, pero lo que pasa es que nos fijamos en los sucedáneos que nos llevan aún más lejos de lo que en verdad queremos, más lejos del momento que puede ser la fuente de la libertad. </span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿En qué nos fijamos? ¿Qué intentamos usar para remplazar una añoranza verdadera?</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkodM4-9vudiZq1Z47Vqy2lwIOO58jABTKJCcisewyc_bZkkpppZY5SWeXgl50H173syf1o2Biz6Cz18ukEakU5JoZO9ASpArh1VngXB_UZn96QOvNlZDq2R-bwhbR1WYwBX0dHyytgIXm/s1600/484586_10151436648300151_725975150_23982149_1123719869_n.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkodM4-9vudiZq1Z47Vqy2lwIOO58jABTKJCcisewyc_bZkkpppZY5SWeXgl50H173syf1o2Biz6Cz18ukEakU5JoZO9ASpArh1VngXB_UZn96QOvNlZDq2R-bwhbR1WYwBX0dHyytgIXm/s400/484586_10151436648300151_725975150_23982149_1123719869_n.jpg" width="400" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Foto cortesía de Andrés Meneses</td></tr>
</tbody></table><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Puede ser que queremos ser dados el visto bueno. Puede ser que pensemos, “Si sólo recibo estos elogios y este reconocimiento, entonces yo sabré que valgo algo. Puede ser dinero, o todo lo que podemos comprar con el dinero. Si tengo esta casa, o este coche, o esta ropa de marca, entonces me aceptarán. La comida es un sucedáneo. ¿Alguna vez te has encontrado sintiéndote sólo o triste, y pensaste que la solución está en el refrigerador? Otros sucedáneos pueden ser el sexo, los drogas, o el alcohol.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">A veces identificamos a esta obsesión de nuestra mente con la frase “si sólo…” Creemos que, “Si sólo todo pudiera estar bien, entonces estaré feliz.” ¿Suena? “Si sólo pudiera ponerme bien de salud.” “Si solo pudiera conocer a la pareja perfecta.” O “si sólo esta pareja y yo pudiéramos salir adelante.” O, “si sólo pudiera perder veinte libras.” La lista sigue y sigue. Y al final creemos que estas cosas nos pueden poner felices.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Pero no podemos sanar el vacío del alma si estamos intentando conseguir un sucedáneo que nos gratifique. Cuando actuamos así, nos lleva más y más lejos de momento, y sólo en el momento podemos encontrar lo que de verdad queremos. Sólo al estar en el presente podemos sentirnos vivos, queridos, entendidos, y liberados.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">¿Cómo podemos dejar de perseguir sucedáneos y volver al presente? El primer paso es identificar cuando estamos intentando llenar el vacío en nuestras almas. Cuando notamos los pensamientos de “si sólo…” Si sólo tuviera…Si sólo pudiera ser así…Cuando notamos que nuestros pensamientos o acciones nos llevan a buscar un sucedáneo, lo mejor es hacer una pausa. Respirar. Con cuidado, reconocemos lo que está pasando. Podemos identificar el deseo detrás del pensamiento con ternura e interés. Podemos reconocer la fuerza que surge como parte de una añoranza.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Sólo al hacer una pausa y prestar más atención, nos acercamos más a la libertad. Primero, traemos conciencia a las capas de dolor y miedo dentro de nuestro ser. Si observamos el dolor y miedo, podemos encontrar la posibilidad de recuperar, experimentar más sanación, vivir con más compasión y presencia. Puede ser que nuestras acciones sean como las de antes pero la diferencia es que estamos más presentes. Pase lo que pase, hacer una pausa nos pone en el camino de la sanación. Hacer una pausa nos ayuda a identificar nuestras necesidades pendientes. Nos ayuda a descubrir la fuente de nuestras añoranzas más profundas. Nos cura del vacío en el alma.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Más información disponible en: </span></span></span><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #336699; text-decoration: none;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></span></span></span></span>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-60841793445395521312012-02-22T08:45:00.000-08:002012-02-22T20:41:04.752-08:00El misterio de quiénes somos<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span><br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: .1pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: .1pt; mso-outline-level: 3; mso-para-margin-bottom: .01gd; mso-para-margin-left: 9.0pt; mso-para-margin-right: 0in; mso-para-margin-top: .01gd;"><span class="Apple-style-span" style="color: #17365d; font-size: medium;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px;"><b><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span> </b></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Cuando mi hijo estaba en una escuela Waldorf, alguien me contó una historia que me encantó.<o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Los niños estaban en clase de arte, sentados en varias mesas, trabajando en sus proyectos. Una niña estaba trabajando muy bien, enfocándose completamente en lo que tenía delante suyo. La profesora se acercó para ver qué hacía. Después de observar por un rato, le preguntó qué estaba dibujando. <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Con mucha confianza, la niña dijo, “Estoy dibujando a Dios.” <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span style="color: #244061; font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span> </span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La profesora se rió y dijo, “Pero cariño, nadie sabe cómo se ve Dios.”<o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Sin ningún titubeo y sin levantar la cabeza, la niña respondió, “¡Se sabrá en un momento!”<o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Esta historia me hizo pensar. ¿Qué nos pasó? ¿Dónde se fue nuestro espíritu? </span><i><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">El estado salvaje de Dios, del espíritu, </span></i><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">como dice el escritor John O’Donahue. Es como si se nos olvida o nos desconectamos de la espontaneidad y el ánimo que expresa la esencia de nuestro espíritu. <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Probablemente la pregunta más profunda en cualquier tradición espiritual es: ¿Quién soy? Si miramos más allá que los papeles que hacemos y las imágenes que nuestra cultura nos da, más allá que las ideas que interiorizamos por nuestra familia, ¿Quién está aquí de verdad? ¿Quién está leyendo ahora? ¿Quién está mirando todo por estos ojos? ¿Quién es el que escucha los sonidos que están alrededor mío? <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="margin-left: 9.0pt;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjFV2LqNwfiSZQmBKkhXr_aBkEwTs-EhuiWxpJukABvwJwdB_XYVLL_8mP42-m5lCalu6hRou0UYsO8EwHX04tReIbuEAPPKacCtH4m2QhvlMNV-Y5fQBxv7aden44CJ8O_5_eGA9RteeJN/s1600/Clouds.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjFV2LqNwfiSZQmBKkhXr_aBkEwTs-EhuiWxpJukABvwJwdB_XYVLL_8mP42-m5lCalu6hRou0UYsO8EwHX04tReIbuEAPPKacCtH4m2QhvlMNV-Y5fQBxv7aden44CJ8O_5_eGA9RteeJN/s1600/Clouds.jpg" /></span></a><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">El Buddha dice que sufrimos porque no sabemos quiénes somos. Se nos ha olvidado quiénes somos. Sufrimos porque nos identificamos con un ser ilusorio que es mucho más estrecho que la verdad, mucho menos que la totalidad de quiénes somos. Muy a menudo nos limitamos a los papeles que nos tocan vivir, ser padres, ayudantes, jefes, pacientes, víctimas, jueces. Resulta que nos enganchamos a nuestra apariencia, nuestro cuerpo. Nos aferramos fácilmente a nuestra personalidad, nuestra inteligencia. Nombramos y contamos nuestros logros. Todo esto forma nuestra identidad, quién creamos que somos. Y la verdad es que esta mezcla, esta constelación, es mucho más pequeña que la verdad. No incluye toda la presencia y todo el amor que está aquí. La esencia sagrada dentro de nosotros es mucho más grande. <br />
</span> <span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Mi amigo, un pastor, me contaba acerca de una reunión interreligiosa que empezó con la siguiente pregunta: ¿De qué manera debemos referirnos al Espíritu o la Divinidad? ¿Qué nombre debemos ponerle? Enseguida alguien preguntó: <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"> “¿Deberíamos llamarle Dios?”<o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“De ninguna manera,” responde una mujer que era Wiccan. “¿Qué tal Diosa?” ella dice.<o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“Uf, responde un pastor de denominación bautista. Él propone, “Espíritu divino.” <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">“No,” declara rotundamente un ateo. <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">La discusión sigue así por un rato más. Al final, un indígena norteamericano propone llamarle e</span><i><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">l gran misterio</span></i><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">, y todos se ponen de acuerdo. Estaban de acuerdo porque al llamarlo así no importaban los conceptos de sus religiones. Todos podrían reconocer que lo divino, lo sagrado es un misterio. <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt; margin-left: 9.0pt; margin-right: 0in; margin-top: 0in;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Cuando vamos por la vida dándonos cuenta que pertenecemos a este gran misterio, y que este misterio vive dentro de nosotros y fluye por nuestros cuerpos, ocurre un despertar en nuestra alma que nos otorga libertad y vida nueva.<o:p></o:p></span></span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><br />
</span></span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="color: #333333; font-size: 16px; line-height: 22px;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">Más información disponible en: </span></span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html" style="color: #336699; text-decoration: none;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></span></span></span></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-40311203860887399522012-02-05T21:23:00.000-08:002012-02-05T21:32:25.881-08:00No importa lo que pase…lo más importante es cómo respondemos<div class="MsoNormal"><span class="apple-style-span"><span lang="ES-TRAD">Una de mis historias preferidas cuenta lo que pasaba hacía décadas cuando los ingleses colonizaban la India. Querían hacer un campo de golf en Calcuta. Aparte del hecho de que los ingleses no deberían haber estado allí, en Calcuta, el campo de golf no era buena idea. Un gran desafío del proyecto era que muchos monos vivían por la zona. </span><o:p></o:p></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbFht3qhcXwRiDepu8vz3_Dm_FYJLhrjBabxFCXFDm-eb6SMfbSEF7pJiZY8Z3lWr9lLfC5v7WaOpwGHmhk1uq2sWZb8Hjjnhh2cYRYYPzIFSVbtjeXfZ30cEZli6z_ZVtjCb-hA_EfBgG/s1600/GolferMonkey.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbFht3qhcXwRiDepu8vz3_Dm_FYJLhrjBabxFCXFDm-eb6SMfbSEF7pJiZY8Z3lWr9lLfC5v7WaOpwGHmhk1uq2sWZb8Hjjnhh2cYRYYPzIFSVbtjeXfZ30cEZli6z_ZVtjCb-hA_EfBgG/s1600/GolferMonkey.jpg" /></a></div><div class="MsoNormal">Resulta que los monos también querían “jugar” al golf, y para mostrar su interés en cada jugada, entraban en el campo y tiraban las pelotas por todos lados. ¡Qué molestia para los golfistas! Como era de esperarse, intentaron controlar a los monos. Primero, con mucho tiempo y energía, construyeron vallas altas que rodeaban el campo. Los monos, muy hábiles, escalaban y podían entrar en el campo de todas maneras. Las vallas no eran una solución. Luego, intentaron distraerles. Yo no sé cómo — a lo mejor su solución era darles plátanos — pero por cada mono que seguía los plátanos, otros dos se le unían. Más y más monos terminaron entrando en el campo para pasarla bien y compartir en la merienda. Desesperados, los golfistas decidieron atraparlos para llevarlos a otro sitio, pero ese plan tampoco les funcionó. Por cada mono que atrapaban, aparecían más familiares aficionados a jugar con las pelotas de golf. La solución final fue establecer la siguiente regla: <i>En este campo de golf de Calcuta, todos los golfistas tienen que seguir jugando donde sea que el mono deje la pelota.</i></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span style="font-size: 10pt;"> </span> Sí, ¡esos golfistas llegaron a una solución!</div><div class="MsoNormal"> </div><div class="MsoNormal"><o:p></o:p></div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD">Todos queremos que la vida sea de cierta manera, y claro que la vida no siempre se cumple según nuestros deseos. A lo mejor, la vida sí está yendo de acuerdo a nuestros planes por un tiempo. Este aparente control hace que pensemos que siempre será así y terminamos aferrándonos a los momentos en los cuales todo va bien. Sin embargo, todo cambia. Nada es permanente. A veces pareciera como si los monos nos están dejando las pelotas de golf exactamente dónde no las queremos. ¿Qué podemos hacer? <o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihWm0R9CquH7Os-iWOZ0MsTQqUqBfySTVWQmLMpiDNAhW0JfDqx9RJy8D01wEzj_j26kBLL4hXOB69GidQX0Cey1TwH7459d6wgxg2gHAgEQyK7BY3nVD2wJ7lFX7Fk-MYc7VbWIkC1H5K/s1600/GolfPath.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEihWm0R9CquH7Os-iWOZ0MsTQqUqBfySTVWQmLMpiDNAhW0JfDqx9RJy8D01wEzj_j26kBLL4hXOB69GidQX0Cey1TwH7459d6wgxg2gHAgEQyK7BY3nVD2wJ7lFX7Fk-MYc7VbWIkC1H5K/s1600/GolfPath.jpg" /></a></div><div class="MsoNormal">A menudo, cuando algo no sale como esperamos, es común echar la culpa a nosotros mismos o a los demás. Puede ser que nuestra manera de reaccionar sea que nos pongamos agresivos. O es posible que nos sintamos victimizados, cómo si el único recurso a nuestra disposición es rendirnos. A veces, para tranquilizarnos usamos la comida y la bebida como sedantes. Pero, lo que está claro es que todas estas reacciones no nos ayudan de verdad.</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">¿Cuál es la verdadera solución? Si vamos a encontrar paz y libertad, nos hace falta hacer una pausa y decir, <i>“Bueno. Los monos han dejado la pelota aquí. Jugaré desde aquí, tan bien como pueda.”</i></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div style="text-align: center;"> ¿Cómo lo hacemos?</div><div align="center" class="MsoNormal" style="text-align: center;"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD">¿Qué pasa si hacemos una pausa y nos conectamos con la presencia interior? Si pensamos en una situación en la vida en que todo no va según nuestro plan — en la cual los monos han dejado la pelota donde menos nos esperamos. Puede que sea en una relación que nos pone nerviosos o alguna inseguridad. ¿Qué tenemos que hacer para “continuar el juego de donde sea que haya caído la pelota”? Si pudiéramos acceder a nuestra sabiduría, nuestra compasión, ¿cómo responderíamos a estas circunstancias? <o:p></o:p></span></div><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-zmYlCK61B1_bs8wYwa-cCyurTmMwDqLyVlQs29Pont5Z4HqLJtI0iaNoAso2JAqQdiHkTg4lL4Aj-HSvAClG28Z1wdz4MGN8Jk4yffjaahRgda3x7E8_JdDtyjvKNWWPf_0MKuuSanjx/s1600/GolfBench.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-zmYlCK61B1_bs8wYwa-cCyurTmMwDqLyVlQs29Pont5Z4HqLJtI0iaNoAso2JAqQdiHkTg4lL4Aj-HSvAClG28Z1wdz4MGN8Jk4yffjaahRgda3x7E8_JdDtyjvKNWWPf_0MKuuSanjx/s1600/GolfBench.jpg" /></a></div><div class="MsoNormal">Una de las grandes lecciones relacionadas con la vida espiritual es: no importa lo que pase en la vida. Lo que importa es cómo respondemos a lo que está delante nuestro. La manera en que respondemos determina nuestro estado de felicidad y alegría. Determina nuestra tranquilidad personal.</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal">¿Qué pasaría en el juego de la vida, cuando un mono nos mueve la pelota al sitio menos esperado, si en vez de reaccionar, tomamos una pausa y respondemos con presencia?</div><div class="MsoNormal"><br />
</div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-22561912537043669362012-01-21T15:52:00.000-08:002012-02-05T20:38:24.029-08:00Aprendiendo a responder, no reaccionar<style>
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</style> <br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12pt;"><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">Para poder despertarnos y vivir fuera del control de nuestros hábitos y condicionamiento, un elemento clave es poder hacer una pausa, reconocer el presente, y abrirnos hacia un espacio más grande que el capullo creado por la mente y los pensamientos. Nuestra tendencia es perdernos en un ciclo de reactividad. Para salir de este patrón, nos hace falta cultivar la capacidad de <i>hacer una pausa, reconocer el presente, y abrir el corazón y la mente hacia lo que hay delante nuestro</i></span><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">. </span></div><div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 12.0pt;"><span style="color: #244061; font-size: 11pt;"></span><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">Uso la metáfora de la segunda flecha muy a menudo, porque ayuda mucho. El Buddha contaba un parábola que enseñaba lo siguiente: </span></div><div class="MsoNormal"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">“Si te dan una flechazo, te darías otro hacía ti mismo?”</span></div><div class="MsoNormal"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"> </span></div><div class="MsoNormal"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhtfuZNR3TDVPn_b1wamuDq-POHpV1DFsp2NLMaXOowjI659Jb2xNBrW0e0-uf-qCrDiMTb4dtVcAQy4NBB_6jDOrZuqTqb0DXQ_-WDa1f7HnT8o4LSl15T1WgH4r4clH1O-JMEKgk2tm2R/s1600/dreamstimefree_2754406.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhtfuZNR3TDVPn_b1wamuDq-POHpV1DFsp2NLMaXOowjI659Jb2xNBrW0e0-uf-qCrDiMTb4dtVcAQy4NBB_6jDOrZuqTqb0DXQ_-WDa1f7HnT8o4LSl15T1WgH4r4clH1O-JMEKgk2tm2R/s320/dreamstimefree_2754406.jpg" width="238" /></a><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">La primera flecha es cuando observamos la manera en que vivimos cada día, cuando observamos lo que pasa, cuando tomamos en cuenta cuando nos duele el cuerpo, cuando notamos que alguien nos trata con una falta de respeto, cuando nos damos cuenta que algo malo le pasa a alguien que queremos. Tirar la segunda flecha en ese caso sería culparnos a nosotros mismos o culpar a los demás. Tirarla es reaccionar con la mente o el cuerpo. La reactividad no nos trae una solución. No nos cura. No nos ayuda.</span></div><br />
<span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">La sanación y la liberación de nuestro Ser son el producto de la <i>no proliferación</i></span><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;"> de nuestros pensamientos. Limitar la influencia de los pensamientos es tener la sabiduría de hacer una pausa y llegar en todo momento al presente. Así accedemos a la sabiduría y la compasión que forma una parte fundamental de nuestro ser. De esta manera no reaccionamos con miedo sino respondemos inteligentemente. </span> <br />
<div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;"></span></div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">La meditación nos ayuda a responder inteligentemente ya que no da la oportunidad de deliberadamente hacer una pausa, reconocer lo que está sucediendo, y abrirnos al espacio que está aquí delante nuestro. Digamos que uno comete un error y automáticamente entra en el hábito de repudiarse. Si en ese momento uno pausa y dice: </span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">“Muy bien. Me voy a sentar, voy a estar aquí ahora y hacer una pausa. ¿Puedo reconocer lo que pasa en esta situación? ¿Puedo reconocer y identificar lo que está aquí delante mío – el espacio, los sonidos, las sensaciones en el cuerpo, y los sentimientos? ¿Puedo abrirme a la presencia que está aquí delante mío?” </span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span style="color: #244061; font-family: Arial; font-size: 11pt;"> </span><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">Cuando prestamos atención a lo que está aquí en este momento, volvemos a nuestro corazón, un corazón sabio. Con presencia, respondemos a la situación en vez de reaccionar. </span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt;">“Tienes la paciencia para esperar hasta que el barro despeje y el agua se vuelva transparente? Puedes esperar hasta que la acción justa y correcta surja por sí sola? </span></div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
</span><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">— Tao Te Ching</span></div><div class="MsoNormal"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal"><span style="color: #244061; font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">Más información disponible en: </span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 11pt;"><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html"><span style="font-family: Arial;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a></span><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-24249319401259507252011-12-19T19:01:00.000-08:002011-12-23T07:52:13.100-08:00La integración de la meditación budista y la psicoterapia<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 12pt;">Cuando estaba en la universidad, pasé un fin de semana en las montañas haciendo senderismo con mi amiga. Ella, de 22 años, era mayor que yo y más sabia. Después de poner nuestra tienda de campaña en su sitio, nos sentamos a orillas de un arroyo, mirando el movimiento del agua y hablando acerca de nuestras vidas. Ella me contó que estaba aprendiendo cómo ser “su propia mejor amiga.” En aquel momento, sentí como si una ola de tristeza me cubriese, y me eché a llorar. Yo no vivía como si fuera mi mejor amiga. Continuamente, me ponía tensa y nerviosa, me criticaba y me juzgaba a mi misma. Según lo que veían los demás, yo estaba bien, tenía éxito en mi vida. Lo que no sabían era que por dentro estaba agobiada, era tenaz, y a veces estaba deprimida. No estaba en paz con ninguna faceta de mi vida. Deseaba poder cuidar mejor de mi misma. Quería aceptar mi experiencia interior, sentir más intimidad y serenidad al relacionarme con los demás. </span></div><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiMKsm4suZWEFY0EryN_krbThyphenhyphenFEyGaFd0mvBdM9tdeHKjM0yCgU9LjAiGnnOVopo49P0fGIQ001NfPgj0xyaWMAQq1ebdekRXZfOFEakFSSv2QhJx67-qE3HABKBZmj0r9mUFTc1VAhFju/s1600/IMG_0643.JPG" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiMKsm4suZWEFY0EryN_krbThyphenhyphenFEyGaFd0mvBdM9tdeHKjM0yCgU9LjAiGnnOVopo49P0fGIQ001NfPgj0xyaWMAQq1ebdekRXZfOFEakFSSv2QhJx67-qE3HABKBZmj0r9mUFTc1VAhFju/s320/IMG_0643.JPG" width="275" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Fotografía: cortesía de Kalliope Kokolis</td></tr>
</tbody></table><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: 12pt;"> </span> <style>
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</style> </div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">Estos deseos y añoranzas me guiaron al mundo del psicoterapia — primero como cliente y luego como terapeuta — y al camino del Budismo. Al combinar estas dos tradiciones, descubrí lo que ahora llamo “Aceptación Radical,” que es reconocer lo que sentimos en el presente, respetando la experiencia con compasión. El psicólogo Carl Rogers escribió: </span></div><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> </span><br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> </span><br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">“La paradoja curiosa es que cuando me acepto tal y como soy, entonces, puedo cambiar.” </span></div><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> </span> <br />
<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><style>
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</style> </div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">En mi propio progreso interior y a la hora de trabajar con mis clientes de psicoterapia y meditación, veo una y otra vez que la Aceptación Radical es la vía hacía la curación de heridas emocionales y transformación espiritual. Cuando podemos afrontar nuestra experiencia con Aceptación Radical, descubrimos la integridad completa, la sabiduría, y el amor que forman parte de nuestro ser más profundo. </span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD">Más información disponible en: <a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a> </span></div><span style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> </span> <br />
<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-12914916892346487902011-11-28T11:46:00.000-08:002011-11-28T12:51:06.373-08:00Movimiento fluido, ánimo y presencia<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><link href="file://localhost/Users/extpo/Library/Caches/TemporaryItems/msoclip/0clip_filelist.xml" rel="File-List"></link> <style>
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</style> <span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">¿Qué nos separa de la felicidad?</span><span lang="ES-TRAD"> </span></span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">Esta pregunta es fundamental en nuestras vidas. La próxima vez que estemos muy contentos, hagámonos las siguientes preguntas, ¿Cómo puede ser? ¿Qué pasa en nuestro interior cuando estamos muy felices?<o:p></o:p></span></span> </div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><o:p> </o:p></span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">Hay dos dimensiones que componen la alegría pura. La primera dimensión es la presencia. Estamos muy felices porque estamos presentes, “estamos aquí,” para experimentar lo que nos está ocurriendo. La segunda dimensión es que estamos vivos, llenos de vida. Las dos dimensiones están íntimamente relacionadas. Cuando estamos felices, podemos sentir que la vida fluye por nuestros cuerpos. Sí prestamos detenida atención a la vida, descubriremos que esta presencia a la que me refiero es conciente, crea espacio. Si de verdad vivimos dentro de esta presencia amplia y profunda, sentiremos el movimiento fluido de la vida.</span></span></div><span style="font-size: small;"><br style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;" /></span><br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyaCIy-H-y9mY3s5ctwEYPRjJleZb6qYU_5XDkne1fzvjDN4vNh5cmqDKbbk6K0I36IO2jEHtIDbmgaEZnPw5Wt7i_ViwRUbVBcEleyHg8jvOCXOOHDB5_sSgWGBOeejaoiEdJbDtL-UHh/s1600/dreamstimefree_1201535-1.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjyaCIy-H-y9mY3s5ctwEYPRjJleZb6qYU_5XDkne1fzvjDN4vNh5cmqDKbbk6K0I36IO2jEHtIDbmgaEZnPw5Wt7i_ViwRUbVBcEleyHg8jvOCXOOHDB5_sSgWGBOeejaoiEdJbDtL-UHh/s1600/dreamstimefree_1201535-1.jpg" /></a><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">Al explorar la relación intima entre vida y presencia, preguntémonos: ¿Qué nos deja entrar en el movimiento fluido del ánimo y alegría? ¿Qué nos permite vivir dentro de esta vida fluida en vez de sólo verla desde fuera? No queremos llegar al final de nuestras vidas sólo para darnos cuenta de no haber sentido la vida fluir por cuerpo, corazón y mente. No queremos llegar al final de la vida diciendo que no hemos vivido con vitalidad y fluidez. O que no hayamos disfrutado de la energía del amor que surge cuando nos relacionamos con otras personas. Por eso, la meditación tiene un papel fundamental en el enriquecimiento de nuestras vidas. Al crear una práctica de conciencia plena, aprendemos a volver al único sitio en nuestro interior donde la alegría, el amor y la paz son posibles. Es decir, que al meditar reconocemos la presencia de la alegría y podemos sentirla. <o:p></o:p></span></span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">Las dos facetas de estar presentes requieren la voluntad o habilidad de parar y dejar de hacer tanto. No significa que debamos separarnos del mundo. Significa vivir en el presente para que nuestra mente esté en el presente y no en el futuro. Cuando estamos aquí, en este momento, nos abrimos a la vida que está delante nuestro. El estar presentes y abrirnos hacia la vida delante nuestro no ocurre muy a menudo ya que nuestra tendencia es de dejar el momento presente y perdernos en nuestros pensamientos.<o:p></o:p></span></span></div><span style="font-size: small;"><span style="color: #244061; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><o:p></o:p></span></span> <br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">La gente se pregunta, “Por qué no tengo más ánimo? ¿Por qué no hay más alegría en mi vida?” Es porque no estamos en un estado de <i>ser</i>. Nuestra práctica de meditación nos ayuda a volver al presente para hacer el cambio de un estado de <i>hacer</i> a uno de <i>ser<o:p></o:p></i></span></span></div><span style="font-size: small;"><span style="color: #244061; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><o:p></o:p></span></span> <br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjhgYgdMo6E8zzD_1VYW3kEIpYAg7Q8ZoXWhe7cWn6vTOcDoEAiZ1aq5D6p6bueJplGNi_eImAJPfz7pMkcYIekIpyiuDnPtDI5IV7GjeyejFBW1gNaciI1qJVXeVc161CX6xCmyupfKTQj/s1600/dreamstimefree_1485192-1.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjhgYgdMo6E8zzD_1VYW3kEIpYAg7Q8ZoXWhe7cWn6vTOcDoEAiZ1aq5D6p6bueJplGNi_eImAJPfz7pMkcYIekIpyiuDnPtDI5IV7GjeyejFBW1gNaciI1qJVXeVc161CX6xCmyupfKTQj/s1600/dreamstimefree_1485192-1.jpg" /></a><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">Desear controlar nos hace salir de presencia viva. Querer controlar es universal. Dentro de nuestro organismo, hay cierta ansiedad sobre nuestra existencia. Intentamos controlar nuestras vidas para sentirnos mejor. Es común querer disfrutar de la vida y evitar el dolor. Muy a menudo estamos reaccionando a lo que hay delante nuestro. Sólo basta con ver los ejemplos de cuan fácil reaccionamos en nuestras relaciones. Cuando estamos con otras personas, y sentimos ansiedad, notemos que hay una parte de nosotros que quiere controlar la situación. Manipulamos la vida para que esté a la altura de nuestras expectativas. Así, a medida que nos ponemos más inseguros, más controlamos. <o:p></o:p></span></span></div><span style="font-size: small;"><span style="color: #244061; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><o:p></o:p></span></span> <br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">En nuestra meditación, cuando notemos que hemos dejado el momento presente, y notemos que estamos controlando la situación, o estamos preocupados, la clave es pausar. Notar lo que está pasando y preguntarnos, “Qué es esto?” Esta simple pausa nos permite volver a nuestros cuerpos y a la fluidez de la vida. La práctica es volver al presente. <o:p></o:p></span></span></div><span style="font-size: small;"><span style="color: #244061; font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><o:p></o:p></span></span> <br />
<div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD">Comparto estas observaciones porque cada vez que despertamos del trance de separación en que vivimos en nuestras mentes, volvemos una y otra vez a la fluidez de la vida. Volvemos al presente en el cual podemos conocer el amor eterno. Un amor que va revelándose de varias maneras. Una y otra vez, al refugiarnos en la fluidez de la vida y en la quietud de la cual proviene, nuestro amor y nuestra capacidad de amar se revelan en nuestras vidas. </span></span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD"></span></span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span lang="ES-TRAD"><o:p>Más información disponible en: <a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a></o:p></span></span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-54798547222767814402011-11-18T21:50:00.000-08:002011-11-28T11:48:05.586-08:00Navegando las olas<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><style>
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</style></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"></div><div class="separator" style="clear: both; font-family: Arial,Helvetica,sans-serif; text-align: center;"><span style="font-size: small;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXXGvVF8sXNTtaPTm6HKyKcE3KzUVxO10TCWRLDlbuVFD3RTabgvE5e1z-UgGH_SsFn6Kg7WzTAvcVKdl1_fm5wKVzViv1es3dFqyUbz4WMV-QxuMOcM5w28F1LyDWCsiaJkHuHfZR-4Ry/s1600/wave.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXXGvVF8sXNTtaPTm6HKyKcE3KzUVxO10TCWRLDlbuVFD3RTabgvE5e1z-UgGH_SsFn6Kg7WzTAvcVKdl1_fm5wKVzViv1es3dFqyUbz4WMV-QxuMOcM5w28F1LyDWCsiaJkHuHfZR-4Ry/s1600/wave.jpg" /></a></span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">No podemos hacer que las olas paren, pero sí podemos aprender a navegarlas.</span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">No podemos <i>controlar</i></span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;"> lo que nos pase en la vida. Van a haber personas con la cuales no estemos de acuerdo. Puede ser que nos enfermemos o que nuestras emociones lleguen a un nivel abrumador y no podamos más con ellas. Lo que podemos hacer es aprender a fluir con la vida. A lo que me refiero es aprender a <i>navegar las olas de la vida</i></span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">. </span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><br />
</span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">Algunas personas hacen surf. ¿Yo? Aprendí a hacer surf con una tabla pequeña, una tabla de <i>boogie</i></span><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">. De hecho, llegué a ser tan fanática del deporte que me pasaba cada verano en el mar navegando las olas hora tras hora. Habían momentos en los cuales tomaba una ola y perdía cualquier sentido de tener control. Ya no había un enfoque en mi propio ser. Sino era como si la ola y yo nos convertíamos en uno. Había una presencia, una fluidez y gracia absoluta. </span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"> </span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">Cuando los atletas entran en la zona de máxima concentración mental, física y emocional mientras entrenan, lo logran porque <i>no</i> están controlando la situación. La cualidad de profunda presencia con la cual viven ese momento les permite conectarse con la fluidez del mismo. Cuando estamos conectados con esta energía fluida, ya no nos importa el qué dirán o nuestra auto crítica. El concepto del yo desaparece. Nos conectamos al movimiento fluido del universo. Nos conectamos con la sabiduría, el amor, el poder, y la fuerza del Infinito. </span></div><div class="MsoNormal" style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span lang="ES-TRAD" style="font-size: small;">La meditación es la técnica que nos conecta con esta presencia y poder. Nos enseña a navegar cualquier ola que venga hacia nosotros. </span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;"><br />
</span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;">Más información disponible en: <a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a></span></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-31094368222306780252011-11-09T07:11:00.000-08:002011-11-09T09:32:19.445-08:00La ilusión del ser irreal en otras personas<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;">Es muy posible que nuestra sensibilidad hacia las noticias mundiales vaya disminuyendo a medida que el número de ellas aumente. En el periódico y en el Internet cada día aparecen tantos reportajes de personas que están en paro, huelgas de hambre, perdida de familiares, noticias de muertes, guerras, y desastres naturales. A medida que nuestra sensibilidad disminuye, nos vamos separando de las otras personas en nuestro mundo y de sus historias. De esta manera empezamos a ver a las otras personas como seres diferentes, “personas irreales.” Al menos que estemos despiertos en un estado de compasión, nos olvidadmos de ver a las personas en las noticias como los seres humanos que realmente son. Aunque son exactamente como nosotros, no reconocemos al otro como “una persona quien mira por sus ojos o siente con su corazón.” Cuando las personas no nos parecen reales, nuestros corazones no pueden responder con auténtica compasión. <br />
<br />
Al valorar a otras personas como seres humanos, vamos reconociendo lo que en realidad pasa en sus vidas; reconocemos sus historias. Sólo con ese reconocimiento, nosotros mismos nos abrimos hacia la compasión y podemos recibirlas con un corazón abierto. </span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;">¿Cómo nos hacemos concientes de que estas personas son “reales”? </span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3GafQSB615VoYqn5-4uW6Vmv6dEBPIEwJqqf8EEfJgDuaspogXtosTT8D-etkSkgkVyp4iv-0onLpeDpxKs3GsEFMTXxz8Y0JYt2SFK4W5_VQHx-z8AngQ8qmz8f3rHZjiLW2uV8c-ae3/s1600/dreamstimefree_2306628.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="212" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3GafQSB615VoYqn5-4uW6Vmv6dEBPIEwJqqf8EEfJgDuaspogXtosTT8D-etkSkgkVyp4iv-0onLpeDpxKs3GsEFMTXxz8Y0JYt2SFK4W5_VQHx-z8AngQ8qmz8f3rHZjiLW2uV8c-ae3/s320/dreamstimefree_2306628.jpg" width="320" /></a><span style="font-size: small;">Una manera es hablar con los que no tienen mucho en común con nosotros. Así empezamos a reconocer el hecho de que detrás de nuestras máscaras, la persona delante nuestro también tiene los mismos miedos, los mismos sueños, el mismo deseo de dar y recibir amor. Al estar en un estado de presencia y escuchar profundamente, reconocemos su humanidad. ¿Qué pasa cuando estamos en un estado de presencia al escuchar? Cuando estamos en ese estado de presencia al escuchar, experimentamos un sentido de receptividad y apertura, mediante el cual formamos parte de aquella presencia. Sea lo que sea que llamemos a aquella presencia: Dios, conciencia pura, nuestra naturaleza o estado de ser puro, los límites entre lo interior y lo exterior se disuelven. Cuando estamos en esa presencia abierta, el otro llega a ser parte de nuestro corazón. Nuestro corazón se abre, se transforma, y el otro se transforma a una persona “real.”<br />
</span></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><span style="font-size: small;">La compasión puede ser descrita como el acto de sentir la vulnerabilidad y sufrimiento que forma parte de nosotros y todos los seres vivientes. El florecer a la compassion también incluye la acción de sintonizarnos con la presencia del sufrimiento y respondiendo conscientemente. Debido a nuestro condicionamiento social, reúsamos a sentirnos vulnerables. El camino de la compasión requiere nuestro valor y enfoque. A medida que despertamos a la realidad de nuestra connección con los demás, nuestros corazones se van llenando de ternura y nuestras acciones sirven para sanar al mundo. <br />
<br />
Más información disponible en: <a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</a><br />
</span></div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-20273776297375936912011-10-30T18:46:00.000-07:002011-10-31T08:50:40.718-07:00El arte sagrado de escuchar<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><i>Escuchar es acercarnos dulcemente<br />
Con ganas de poder ser cambiados<br />
Por lo que escuchamos. </i> </div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"> —Mark Nepo - Poeta <br />
<br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">¿Qué pasa cuando estamos en un estado de presencia al escuchar? Cuando estamos en ese estado de presencia al escuchar, experimentamos un sentido de receptividad y apertura, mediante el cual formamos parte de aquella presencia. Sea lo que sea que llamemos a aquella presencia (Dios, conciencia pura, nuestra naturaleza o estado de ser puro) los límites entre lo interior y lo exterior se disuelven, y nos convertimos en un luminoso campo de conciencia. Cuando estamos en esa presencia abierta y expansiva, podemos responder en vez de reaccionar a la vida, al camino que tenemos delante nuestro. Al ver la vida desde este estado de presencia terminamos enamorándonos de ella.</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikrFwijfRCR5ZO9oh6TLT3rLKScceM4DCdit70YW7nYVe4aI81bgDgaEnOsEZeRF39hZnsLH2SDWq_s4sJNzEd4e2JT1LiUf45_Rai6-nrxj3C7WomiuVnfxDwgHAPr_fOoru5QfRIzpnh/s1600/Tree-Comet-Clouds.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="240" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEikrFwijfRCR5ZO9oh6TLT3rLKScceM4DCdit70YW7nYVe4aI81bgDgaEnOsEZeRF39hZnsLH2SDWq_s4sJNzEd4e2JT1LiUf45_Rai6-nrxj3C7WomiuVnfxDwgHAPr_fOoru5QfRIzpnh/s320/Tree-Comet-Clouds.jpg" width="320" /></a>Este estado de presencia al escuchar es el precursor o requisito esencial para relacionarnos con los demás basados en el amor. A medida que vayamos obteniendo un mejor entendimiento de este estado de presencia al escuchar – el sonido y el tono de voz de la otra persona pueden ser recibidos de la misma manera en que recibimos el sonido de la lluvia en una tarde otoño lluviosa – sin resistencia, con una mejor noción de cómo crear, apoyar, y mantener una relación amorosa.</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Puede ser que esta manera de escuchar nos ponga en una posición muy vulnerable. Tan pronto como paramos de planear lo que vamos a decir o dejamos de manipular lo que dice la otra persona, de repente no tenemos control. Nos abrimos hacia nuestra propia tristeza, nuestra propia rabia e inquietud. Escuchar significa dejar de controlar. Es un gran desafío. </div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Cuando alguien nos habla, pasamos la mayoría del tiempo planeando lo que vamos a decir en cuanto la otra persona deje de hablar. En vez de escuchar nos pasamos la conversación evaluándola, intentando presentar nuestro punto de vista lo mejor posible, o controlando la situación. </div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Escuchar de una manera pura es dejar de controlar. No es fácil y requiere mucha práctica. Sólo cuando podemos dejar de controlar, es cuando podemos recibir el amor puro. No podemos ver o entender a alguien en los momentos en los cuales estamos intentando controlar lo que se dice o cuando nuestra intención es dejar una buena impresión con lo que decimos. En estas circunstancias, no hay espacio para que la otra persona crezca y para que pueda ser quien realmente es. Escuchar y recibir incondicionalmente lo que otra persona expresa son expresiones de amor. </div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnxS-exKZPQot087jjsbcRv4-9tkGXBXlE530l5XD4RlclCMoB-rmibYmtxD4MaV507Gy1jwZnB3KCFYc1J1BlB_9A69WDHGZ05VfLyr0xEVhbqyqR92VS0E7CjQM1QK4IoiDsgPlDsxGV/s1600/TreeShadow.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="206" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnxS-exKZPQot087jjsbcRv4-9tkGXBXlE530l5XD4RlclCMoB-rmibYmtxD4MaV507Gy1jwZnB3KCFYc1J1BlB_9A69WDHGZ05VfLyr0xEVhbqyqR92VS0E7CjQM1QK4IoiDsgPlDsxGV/s320/TreeShadow.jpg" width="320" /></a>Cuando alguien nos escucha, nos sentimos conectados. Cuando nadie nos escucha, nos sentimos separados. Ya sea que nos estemos comunicando entre diferentes tribus, grupos étnicos, razas o generaciones, necesitamos poder escucharnos. A medida que nos entendemos mejor, tenemos menos miedo. Cuando tenemos menos miedo, confiamos más. Y cuando más confiamos, más dejamos que el amor fluya en nuestras vidas. </div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"></div><br />
<br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial, Helvetica, sans-serif;"><i>No es verdad que para llegar a conocer la verdadera belleza de un árbol,<br />
Uno debe de descansar tranquilamente debajo de su sombra?<br />
¿No tiene que ponerse debajo de su sombra?<br />
Para conocer a alguien, es necesario pararnos debajo de su sombra por un momento.<br />
¿Qué significa esto?<br />
Significa poder escuchar en silencio y recibir la esencia de quién realmente es<br />
Como si estuviéramos debajo de la sombra de un árbol, conociéndolo desde su interior.</i></span><br />
<div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;">Más información disponible en:<i> <a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html"><span class="Apple-style-span" style="font-style: normal;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span></a><br />
</i></div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div><div style="font-family: Arial,Helvetica,sans-serif;"><br />
</div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2890132643422574927.post-32844692092470446412011-10-24T08:33:00.000-07:002011-10-24T19:18:25.162-07:00El estrés y la meditación<div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">El mago Harry Houdini viajaba por los pequeños pueblos de Europa haciendo sus demostraciones de escapismo. Pedía ser atado por los carceleros con una camisa de fuerza y luego ser encerrado en una celda para ver si podía escaparse. Una y otra vez, todos los espectadores quedaban asombrados ya que no había camisa ni celda alguna que pudiese contener a Houdini. <o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><br />
</div><table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: right; margin-left: 1em; text-align: right;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiaZmsHgFc6u5yLU2kVqZ1wIZO87Z0xzVZ4JWabO-eQ1v8OjpxDk4DUTstoZkX5RwXDqnLfQ4e0z3DohYRZoW8onq6ttVfkjlriJhwcCSIf8fZKnRbV_2J1HgDs01I5la33eqAEI3f2vtP7/s1600/zx1gitz7.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiaZmsHgFc6u5yLU2kVqZ1wIZO87Z0xzVZ4JWabO-eQ1v8OjpxDk4DUTstoZkX5RwXDqnLfQ4e0z3DohYRZoW8onq6ttVfkjlriJhwcCSIf8fZKnRbV_2J1HgDs01I5la33eqAEI3f2vtP7/s320/zx1gitz7.jpg" width="240" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;"><br />
</td></tr>
</tbody></table><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">Un día, en una aldea irlandesa, delante de una multitud de gente, consiguió zafarse de la camisa de fuerza que le habían puesto pero por más que tratase, no podía abrir el candado de la celda. Después de varias horas, desilusionados, los lugareños se fueron. Houdini no entendía qué pasaba ya que hasta aquel momento, nunca ningún candado le había dado tal reto. Confundido y frustrado, Houdini preguntó al carcelero acerca de la cerradura, intentando entender por qué no podía abrirla. El carcelero le dijo, “Es una cerradura común y corriente. No tiene nada de especial. Sabiendo que tu puedes abrir cualquier cerradura, no me molesté en cerrarla con llave.” </span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
</span><br />
<span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">Houdini, no lo podía creer. Había estado encerrándose dentro de la celda todo el tiempo ya que suponía que la cerradura estaba echada llave. Estaba libre desde un principio.<o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
Algo muy similar nos ocurre a nosotros. Pasamos el día suponiendo que hay un problema con nosotros mismos, que hay algo malo que nos queda por resolver.<i> </i>Limitamos nuestra perspectiva, nos ponemos tensos, ocupados, nos estresamos. <o:p></o:p></span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial; font-size: 15px;">¿No es así?</span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial; font-size: 15px;"> </span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">El Buddha dijo que lo que piensa una persona se refleja en su mente y se convierte en una tendencia de la misma. Esto también afecta a nuestros cuerpos. Si estamos preocupados, nuestro cuerpo produce un flujo constante de adrenalina y cortisol que nos mantiene nerviosos e inquietos. <o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">Consideremos lo siguiente: ¿Los pensamientos que uno tiene durante el día producen un sentimiento de bondad, interés, o posibilidad? ¿O despiertan tensión, separación, o inquietud? <o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">La neurociencia y sus avances más recientes confirman que las neuronas que se activan juntas permanecen juntas. Esto quiere decir que mientras más pensamos en algo, más forma parte de nuestra realidad. A un nivel físico, la conección entre neuronas se fortalece.<o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><br />
</div><div class="MsoNormal"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
</span><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">La meditación nos ofrece un método completamente radical para liberarnos de los pensamientos que no nos favorecen, de aquel trance en el cual caemos debido al estrés. Podríamos llamarlo: <i>trance estresante</i>. A medida que profundizamos nuestra práctica de meditación, desarrollamos la habilidad de volvernos conscientes de nuestros pensamientos. Esto nos da la libertad de elegir dónde poner nuestra atención. Poco a poco nos vamos dando cuenta que <b>no es necesario creer en nuestros pensamientos. </b>En especial, aquellos pensamientos que no nos favorecen y van formando una celda alrededor de nuestra mente. Una celda como la de Houdini, que parece estar cerrada, pero en realidad está abierta y somos nosotros los que inconscientemente nos encerramos. <o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
<br />
</span><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><o:p></o:p></span></div><div class="MsoNormal"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><br />
</span><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">Más información disponible en: </span><a href="http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html"><span style="font-family: Arial; font-size: 11pt;">http://www.tarabrach.com/audiodharma-Spanish.html</span><span lang="ES-TRAD" style="font-family: Arial; font-size: 11pt;"><o:p></o:p></span></a></div><div class="MsoNormal"><br />
</div>Tara Brachhttp://www.blogger.com/profile/16295461434883466405noreply@blogger.com1